Se vulneraría el derecho de recibir contenidos más plurales y diversos
Luego de la presentación en el Senado de la República de dos propuestas para posponer la fecha del apagón analógico, programado para el próximo 31 de diciembre, diversas voces se han manifestado en contra de una eventual decisión en este sentido.
En opinión de la Asociación Mexicana de Defensorías de las Audiencias (Amda), postergar la transición a la televisión digital abierta tendría las siguientes implicaciones:
*Afectar el derecho constitucional que tienen las audiencias en términos de acceso a los servicios de televisión abierta.
*Se vulneraría el derecho de recibir contenidos más plurales y diversos derivado del retraso de inicio de operaciones del ganador de la licitación de la cadena nacional de televisión digital abierta, Cadena Tres.
*Se tendría que postergar la licitación de 123 canales de televisión abierta digital que dependen de la liberación del espectro que en su modalidad analógica ocupan diversos concesionarios.
*Que el retraso del apagón obedezca a la “queja de una televisora que durante décadas ha explotado en calidad de monopolio el mercado de la televisión”.
El apagón analógico es el proceso mediante el cual las empresas que proveen el servicio de televisión abierta dejan de transmitir sus señales en formato analógico para dar paso a la tecnología digital.
Una vez que el Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel) determina la fecha en la que se realizará la transición, las nuevas señales sólo se podrán ver en televisores digitales o en un televisor analógico sólo si cuenta con un decodificador.
Sin embargo, si el usuario cuenta con un sistema de televisión restringida, ya sea vía cable o satelital, no tendrá problema alguno para ver la programación de la televisión abierta.
C$C-GM