En una década, la Inversión Extranjera Directa (IED) en telecomunicaciones registró una sustancial caída, al pasar de 2 mil 600 millones de dólares a sólo 31 millones de dólares en 2022, fenómeno que se puede atribuir a factores como los altos precios del espectro y la percepción de que los procesos de competencia no se han desarrollado bajo condiciones propicias para los nuevos operadores.
“De lo que teníamos en 2013, que ha sido el máximo que se ha evidenciado de IED en nuestro país, hacia lo que visualizamos hoy ha habido una caída muy importante. Sin embargo, el sector telecomunicaciones dentro del PIB nacional ha representado un porcentaje muy importante (3.3 por ciento)”, refirió Salma Jalife, directora de Centro México Digital.
Entre las causas que podrían estar generando este comportamiento en la IED sectorial se puede identificar la decisión de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) de mantener el alto cobro por derecho de uso del espectro radioeléctrico, el cual se encuentra 60 por ciento por arriba del benchmark internacional.
Pero también existen otros aspectos como la devolución de espectro de Telefónica y AT&T, la falta de nombramientos de las tres comisionadas del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), así como otro elemento clave: la percepción de que los procesos de competencia no se han desarrollado bajo condiciones propicias para los nuevos operadores.
“Todo este entorno nos está afectando, y seguramente la percepción a nivel internacional es que no hay certidumbre jurídica. Entre las consecuencias se tiene una menor recaudación de 2019 a 2022, bajó 9.7 por ciento, y se han postergado licitaciones para poder ampliar la infraestructura de 5G. En contraste, tenemos otro aspecto que llama la atención que es la inversión que manifestó América Móvil de 8 mil 800 millones de dólares para el despliegue de 5G en todo el país”.
Salma Jalife refirió que de acuerdo con estimaciones de especialistas como Raúl Katz y Sebastián Cabello, México requiere invertir hacia el año 2028 un monto de alrededor de 37 mil millones de dólares para proveer una banda ancha móvil simétrica de unos 50 Mbps.
Asimismo, se estima que sería necesaria una inversión anual de capital de los operadores móviles mexicanos de poco más de 2 mil millones de dólares, tomando como base constante destinar 40 por ciento al costo de mantenimiento, 20 por ciento a inversiones anticipadas y 40 por ciento a expansión.
“Esto implicaría que los operadores tendrían que incrementar en 198.2 por ciento su CAPEX para cubrir esa meta de proveer a todo el país con una banda ancha móvil simétrica de 50 Mbps”.
No obstante, entre 2013 y 2022 los accesos de banda ancha fija pasaron de 11.8 millones en 2013 a 24.6 millones en 2022; mientras que en banda ancha móvil las cifras pasaron de 27.4 millones a 112.1 millones, lo que demuestra el dinamismo del sector de las telecomunicaciones cuya presencia en el PIB nacional el año pasado llegó al 3.3 por ciento del total de este indicador.
Salma Jalife advirtió que según proyecciones de Nokia y Omdia realizadas en 2020, en México se estima un impacto económico de 888 mil 400 millones de dólares debido a la presencia de 5G, acumulados en 15 años, con las mayores cifras acumuladas en los sectores de la construcción, Tecnologías de la Información y Comunicación, así como manufactura.
Con todo, dijo que es importante no dejar sólo la carga a las telecomunicaciones en el desarrollo de las redes de quinta generación. Por ejemplo, con toda la innovación que implica, las Fintech podrían convertirse en actores relevantes para desarrollar 5G en zonas alejadas y apoyar la madurez de las Mypimes, que no tienen acceso al sistema financiero tradicional, pero sí pueden ser atendidas por este tipo de empresas.
Es necesario, dijo, darle a la tecnología de 5G su justo valor como habilitador de soluciones y, por lo tanto, como potenciador del crecimiento económico del país, aunque para ello, se requerirán también importantes inversiones en los próximos años, así como resolver algunos temas bien conocidos en el sector, que frenan la inversión.
C$T-GM