La Inteligencia Artificial (IA) es “la combinación de algoritmos con el propósito de crear una máquina que presente las mismas capacidades que los humanos para realizar trabajos, procesamientos y análisis de datos, así como la creación de máquinas con la misma capacidad humana, robots programados para ayudarnos”, una herramienta que cada vez se siente más cercana a la gente común y sin duda llegó para quedarse.
En esto coincidieron las personas encuestadas por el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), como parte del estudio cualitativo “Conocimiento y percepción sobre la Inteligencia Artificial y ChatGPT 2023”, quienes contestaron un cuestionario por internet, aplicado en la Ciudad de México, Monterrey y Guadalajara.
Sobre el conocimiento que manifestron los encuestados en relación a la IA, destacaron que este tipo de herramientas también sirven para almacenar y generar datos generales, además de tener capacidad para aprender a través de las preguntas y la información con la que se le alimenta.
La encuesta, tal como su nombre lo indica es “cualitativa”, de manera que no proporciona datos numéricos, sino indicadores sobre la percepción que las personas tienen de esta herramienta que poco a poco se va percibiendo más como un elemento de ayuda en el trabajo, en lugar de un peligro para los empleos, como se concebía a finales de 2022, cuando ChatGPT hizo su disruptiva aparición en el mundo.
Si bien el propio IFT advierte que, al haber entrevistado sólo a personas de las tres principales ciudades del país, los resultados no pueden extrapolarse a todo el territorio nacional, los hombres y mujeres entre 20 y 45 años del nivel socioeconómico (NSE) “C Típico”, que participaron en este ejercicio a finales de octubre del año pasado, coindicen en que al principio, la herramienta parecía lejana a las personas comunes, pero ahora ya no se percibe así, sino como algo común y accesible para todos.
El resultado de la encuesta revela que existe la percepción de cada día hay más aplicaciones especializadas de la IA, es decir, cada vez se puede aplicar a actividades más concretas y comienza a percibirse que son más los beneficios de esta tecnología, que las desventajas que pudiera generar, especialmente en materia de protección de datos personales, que es una de las principales preocupaciones de los usuarios.
Al dar a conocer en un comunicado los resultados de esta encuesta, el IFT detalló que según lo usuarios, la IA tiene ventajas como la eficacia para realizar tareas, así como ahorro de tiempo y esfuerzo, que ayudan a agilizar actividades rutinarias para así enfocarse en actividades de análisis más complejos.
Específicamente, en lo laboral, los encuestados perciben impacto por la agilidad en la realización de tareas, la disminución de errores y la facilidad y rapidez para ejecutar acciones, mientras en la educación se percibe que apoya en la investigación y la obtención de información de fuentes más amplias.
Los encuestados coincidieron en que, en materia de comunicación, la IA ayuda a mantener informado al usuario de manera rápida y oportuna a través de distintas plataformas, en tanto en que materia de transporte ayuda a ejecutar estas acciones de manera más segura y eficiente, así como facilitar labores en el hogar.
Y si bien comienza a dispersarse un poco el temor de que esta tecnología provoque la pérdida de empleos, pues se reconoce que ayuda en el trabajo y actividades personales, también se percibe que compite y hasta reemplaza actividades que hoy hacen seres humanos.
El ejercicio también midió las preocupaciones que los usuarios tienen sobre la herramienta. Entre ellas destacan la de perder la capacidad de hacer las cosas por cuenta propia, cuando el nivel de dependencia de la IA se eleve; también, la posibilidad de que supere al ser humano, al llegar al punto de tomar decisiones propias y, ya en el terreno de lo delictivo, la posibilidad de perder el control de los datos personales (por ejemplo por robo) o bien que se suplante la identidad.
Igualmente, se observa la posibilidad de sufrir hackeos en la información bancaria del usuario, sin descuidar el acoso, el bullying escolar y hasta la posibilidad de “manchar la imagen de las personas”.
Con todo, a pesar de que se perciben algunos riesgos, parece crecer la percepción de que esta tecnología ya forma parte de nuestra vida cotidiana y que aquí se va a quedar, porque facilita muchas actividades, ahorra tiempo y ayuda a ser más eficiente en actividades personales, escolares y laborales.
C$T-EVP