En próximas semanas el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) a través de BID Lab, laboratorio de innovación del BID y BID Invest, brazo del grupo que colabora con el sector privado, lanzará la iniciativa FINLAC, centrada en promover la inclusión financiera en América Latina y el Caribe, para permitir el acceso de los sectores más vulnerables de la sociedad a sistemas financieros modernos, básicamente centrados en empresas Fintech.
En un artículo publicado por BID Lab en torno a la importancia de las llamadas Fintech (empresas financieras de base tecnológica) para ampliar el acceso de las personas a servicios financieros, se hizo el anuncio del “inminente lanzamiento de la iniciativa, que buscará guiar a las empresas y a los responsables de las políticas públicas, para diseñar e implementar prácticas empresariales, políticas y reformas más eficaces para crear mercados inclusivos en América Latina y El Caribe”.
Cabe señalar que de acuerdo con información del BID, hasta 2021, apenas 76 por ciento de los latinoamericanos mayores de 15 años tenían una cuenta bancaria, y aunque esa cifra fue sustancialmente mayor a la que se tenía 10 años antes (50 por ciento), aún hay muchas personas que no pueden acceder al sistema financiero.
Esto se debe a que las reglas y los estándares de la banca tradicional, no han podido incluir a personas que, con las Fintech, sí pueden contar con servicios financieros. De hecho, “las cuentas de dinero móvil, es decir, las que están vinculadas exclusivamente a un dispositivo móvil, han dado un salto vertiginoso ya que en 2021 casi uno de cada cuatro adultos de nuestra región (23 por ciento) disponían de una”.
En ese sentido y para promover el acceso a servicios financieros de una población con alto potencial emprendedor, la iniciativa FINLAC del BID generará y compartirá conocimiento y datos relevantes en inclusión financiera, probará modelos de negocio innovadores que se puedan expandir en la región y diseminará recomendaciones y mejores prácticas para construir mercados financieros más inclusivos.
De hecho, a lo largo de los últimos 30 años, el BID ha innovado para lograr inclusión financiera, con una cartera que apoya a Fintech en inversiones en proyectos con impacto en poblaciones vulnerables.
En los últimos seis años, el BID Lab ha invertido en numerosos proyectos para expandir el acceso a servicios financieros en Latinoamérica a través del apalancamiento de innovación financiera, incorporando nuevas herramientas digitales y soluciones fintech con las que se ha buscado reducir algunas de las brechas de la región en términos de inclusión financiera.
Por ejemplo, el retraso en la penetración y uso de servicios financieros en las poblaciones más vulnerables, incluidas las mujeres, los problemas de financiamiento de las Mipymes o las dificultades de acceso de las áreas rurales y remotas, por solo citar algunos.
Entre ellos destaca la Fundación Génesis Empresarial que busca ampliar la cobertura de servicios financieros para población de bajos ingresos en Guatemala, creando un ecosistema de pagos digitales para personas que habitan en el 80 por ciento de las áreas rurales del país. También Cubo Technologies, que impulsa los pagos digitales en micro y pequeños comercios, que este año dará herramientas para digitalizar negocios a 70 mil beneficiarios, 40 por ciento de ellos de mujeres.
BID Lab ha impulsado la iniciativa Pago46 que permite a los usuarios pagar con efectivo servicios adquiridos a través de plataformas digitales. Además, genera ingresos adicionales a los agentes de la economía gig, como los mensajeros de Rappi que obtienen una comisión por recoger el efectivo en las casas de los usuarios.
Este proyecto se encuentra presente en Argentina, Chile, Colombia, Guatemala, México y Perú, y el 99 por ciento de sus agentes pertenecen a poblaciones de bajos ingresos.
Otras de las iniciativas que ha ayudado a impulsar BID Lab son Term Finance, en el Caribe, que facilita servicios crediticios para Mipymes; Migrante, que ayuda con créditos a migrantes para que puedan iniciar sus vidas en el país de acogida; y Waynimovil, plataforma de microcréditos que ha colocado el 72 por ciento de su cartera en personas con ingresos menores a 400 dólares al mes y de los cuales 66 por ciento son mujeres.
Estas iniciativas han sido impulsadas por el BID debido a que “la inclusión financiera es una prioridad para el desarrollo y aunque el margen de mejora sigue siendo grande, nuestra región va por buen camino”.
C$T-GM