El entorno regulatorio en el que se desenvuelve el mercado de telecomunicaciones en México, las condiciones de la economía doméstica con un recorte presupuestal de 133 mil millones casi al inicio del primer semestre del año, y otro de 31 mil millones que se materializó prácticamente al cierre del periodo, más el incremento de la competencia en el sector, pegaron en el desempeño de la acción de América Móvil (BMV:AMX), el título más influyente del mercado accionario mexicano.
Durante el primer semestre del año la acción de AMX tuvo una caída de 7.43 por ciento, que se añade al desplome de 27.68 por ciento, registrado en el periodo previo; su precio al cierre del periodo, ubicado en 11.22 pesos por acción, es el más bajo desde agosto de 2003 (13 años).
Debido precisamente a que se registran cotizaciones más bajas en otros periodos, así como al entorno negativo del sector en particular para el segundo semestre del año, y de la economía en general, se teme que el precio del título de la telefónica no haya tocado piso.
“Todo México será territorio AT&T”, retó la telefónica estadunidense a principios del año pasado al corporativo mexicano utilizando y adaptando el propio slogan de esa compañía.
La competencia en el sector se ha profundizado, sin olvidar que los dos grandes jugadores del sector, Televisa en radiocomunicación y América Móvil en telecomunicaciones, fueron declarados agentes preponderantes por el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) hace más de dos años.
La reforma de telecomunicaciones sí ha dado resultados si consideramos que los precios en el mercado han bajado y que hay más y mejores servicios; sin embargo, los riesgos para la industria también se han incrementado porque el entorno de competencia está igualmente afectado por el contexto en el que se desenvuelve la economía.
Crisis regional
Un elemento adicional es el entorno que registra la industria en la región, en donde la crisis se ha profundizado en algunos mercados importantes: En Brasil se registró una de las grandes quiebras de la historia de ese país con la telefónica Oi, ante la pesada carga financiera de más de 20 mil 400 millones de dólares que deberá reestructurar.
Con esta quiebra el sector en esa región del continente se profundiza ya que la empresa contaba con filiales en Chile, Argentina, Colombia y Perú, por mencionar algunos, empresas que también deberán ser rescatadas.
Adicionalmente, la férrea competencia que libran jugadores como Telefónica, AT&T y empresas locales más pequeñas, generan un contexto complicado para el sector.
La caída de Oi no es cosa menor, mucho menos tratándose de un país como Brasil en el que se espera una recesión para el segundo semestre del año, y que cuenta con un mercado de consumo de casi 300 millones de habitantes, el más grande de Latinoamérica y por lo tanto uno de los referentes para la región.
El título de América Móvil ha registrado niveles mínimos de 6.58 pesos por acción hacia finales del año 2002. “Hay margen para que el título baje más, todo dependerá del entorno del mercado”, dicen analistas.
Efectivamente, la mala noticia es que la acción del corporativo mexicano tiene un margen de descenso adicional de cuando menos 41.35 por ciento considerando el precio de cierre del semestre. Un factor adicional entró ya en juego no solamente para la acción de AMX sino para el mercado de valores en general, el incremento de la tasa de interés con el que cerró el semestre el banco central mexicano, tradicionalmente los aumentos en las tasas son nocivos para la renta variable, y ésta no sería la excepción.
C$C-EVP