La divulgación de información privada o íntima es el tercer motivo de preocupación entre las personas usuarias de internet en México, quienes mencionan en primer lugar los ataques relacionados con aspectos financieros, y en segundo, la suplantación de identidad que, además de ser de índole financiero, también puede afectar la esfera de lo privado.
El 3er. Estudio de Ciberseguridad en México 2023, presentado por la Asociación de Internet .MX, muestra que 69 por ciento de los cibernautas entre 18 y 77 años, les preocupa “bastante” o “mucho” la posibilidad de recibir ataques cibernéticos, con una notable mayoría del 73 por ciento en la posibilidad de convertirse en víctima de fraudes o pérdidas financieras y 66 por ciento por sufrir suplantación de identidad.
“Esto permite inferir que, al ser los principales usuarios de las generaciones más productivas, se sienten en riesgo principalmente por ataques que puedan afectar su economía y su prestigio”.
El documento que se presentó en el Senado de la República, donde también se firmó el Pacto Nacional por la Ciberseguridad de Niñas, Niños y Adolescentes, indica que otras preocupaciones importantes son la divulgación de información privada o íntima (58 por ciento); la pérdida de información (51 por ciento) y muy por debajo el ransomware, el acceso a noticias falsas o el ingreso accidental a sitios inapropiados.
Para obtener esta información, se tomaron en cuenta dos muestras: una con mil 293 internautas de cuatro grupos de edad: 18 a 26 años (generación Z); 27 a 42 años (millennials); 43-58 años (generación X) y 58 a 77 años (baby boomers); y distribuidos en 712 internautas en general; 324 familias y 257 empresas, a quienes se les enviaron encuestas por redes sociales entre los meses de septiembre y octubre de este año, con un error muestral del 6.1 por ciento.
Derivado de estas respuestas, se conoció que la mayoría de las medidas de seguridad que se toman, están más relacionadas con la conciencia sobre el uso adecuado del internet, que con el uso de tecnología específica para protección.
De este modo, 79 por ciento de las personas consideran que para proteger sus dispositivos e información, lo mejor es no compartir contraseñas; seguido de realizar respaldos periódicos con 62 por ciento; utilizar una VPN 53 por ciento; actualizar el sistema operativo 50 por ciento e instalar sistemas operativos anti malware, 44 por ciento.
Por otro lado, las personas encuestadas observan como riesgos principales: compartir información personal en foros públicos; descargar archivos de fuentes desconocidas; navegar en sitios de dudosa reputación; carecer de contraseñas o que éstas sean débiles o carecer de antivirus.
Llama la atención que ante la pregunta de si la persona considera que su equipo (computadora, tablet o celular) está debidamente protegido contra riesgos, 45 por ciento de las personas dijeron que sí, pero 26 por ciento que no y, sorprendentemente, 29 por ciento no lo sabe. Sin embargo, los riesgos son evidentes, pues en el último año, el 18 por ciento de las personas usuarias de internet han sido contactadas por desconocidos para pedirles información, dinero o acceso a sus cuentas.
Por otra parte, sólo 21 por ciento de las personas han reportado ante las autoridades experiencias negativas en el uso de internet, pero siete de cada 10 personas (68.40 por ciento), consideran que la participación de las autoridades fue poco adecuada o no adecuada al reportar incidentes.
En lo que toca a padres y madres de familia respecto al cuidado que ponen en cómo sus hijos utilizan internet, en el apartado que se denomina “Ciberseguridad en familias mexicanas”, destaca el hecho que la mayor preocupación es que los menores sufran acoso por parte de algún adulto (78 por ciento).
Otro tema que preocupa es la compartición de fotos privadas (70 por ciento); que se acceda a información personal (64 por ciento); sufrir acoso o violencia por parte de otros menores de edad (57 por ciento); aislarse del contacto social por el excesivo uso de dispositivos (39 por ciento) y muy por detrás de esto, que los menores realicen compras en línea no autorizadas por los padres (13 por ciento).
Y a pesar de estas preocupaciones muy marcadas, llama la atención que los adultos encuentran muchas dificultades para poner límites a sus hijos en el uso de los dispositivos (84 por ciento), aunque ese mismo porcentaje considera que poner límites es precisamente la acción más relevante para proteger a los hijos en el uso del internet.
Los padres y madres de familia reportan que las experiencias negativas que han tenido sus hijos, se registran en redes sociales (64 por ciento) y videojuegos (50 por ciento) con acoso por parte de otros menores de edad en el 57 por ciento de los casos y solicitud de imágenes íntimas en el 43 por ciento.
Mientras esta situación prevalece, 42 por ciento de las personas adultas entrevistadas dicen no utilizar controles parentales, en tanto que 7 de cada 10 asegura poner límite de tiempo en el uso del internet y los dispositivos, lo cual no impide que 57 por ciento de los menores pasen conectados entre 2 y 5 horas diarias.
Además, 67 por ciento de los padres que han detectado experiencias negativas de sus hijos navegando en internet, simplemente no las ha denunciado a las autoridades y de quienes sí lo han hecho, el 69.6 por ciento, considera “poco adecuada” o “no adecuada” la respuesta de las autoridades.
Cabe señalar que en el estudio donde también participó el Consejo de Datos y Tecnologías Emergentes, así como algunas empresas tecnológicas, también incluyó una segunda recolección de datos tomada a través de herramientas de inteligencia artificial en 536 mil 879 dispositivos de internautas en México, con usuarios que tuvieran alguna aplicación de seguridad.
Esta segunda parte del estudio, tuvo como objetivo revisar y analizar los datos del ecosistema digital, si bien los resultados no se publican en esta entrega.
C$T-GM