Al mostrar eficiencia y resultados tangibles, el uso y desarrollo de centros de datos en el mercado mexicano se han convertido en el punto neurálgico de instituciones y empresas modernas, lo que explica su creciente demanda y el comportamiento al alza que mostrará este año el mercado de componentes que alimenta este sector.
“De acuerdo con el modelo de la demanda TIC elaborado por la consultora Select, para 2022 el valor del gasto de componentes para centros de datos modernos será de 44 mil 569 millones de pesos (2 mil 200 millones de dólares) lo que representará un incremento anual de 7.0 por ciento”, destaca en sus previsiones Alejandro Vargas González, experto en investigación de Mercado y Desarrollo de Negocios en Select.
Operación de servicios digitales para atención al ciudadano o clientes, transacciones comerciales, altas y bajas de cuentas financieras, evolución de ventas e inventarios, son sólo algunas de las actividades donde el almacenamiento de datos aporta, eficiencias y mayor productividad a las organizaciones e instituciones, logrando ambientes de alto desempeño y mejores dinámicas en los negocios.
El especialista destacó que el valor estimado del mercado de componentes está basado en la inversión que están ejerciendo, proveedores globales como Microsoft, AWS, Oracle, así como empresas latinoamericanas –Telmex, KIO, O Data-; que ante la creciente demanda de sus servicios están ampliando sus capacidades en territorio mexicano.
Lo que se suma también al gasto-inversión que realizan grandes empresas usuarias de los centros de datos como son las organizaciones que operan en los sectores financiero, energía, y de proyectos estratégicos para el gobierno federal, que en general tienen como objetivo modernizar y hacer más eficientes su infraestructura crítica.
Se prevé, indicó, que del total del valor alcanzado al cierre de este año (44 mil 569 millones de pesos), alrededor del 10 por ciento estará destinado al desarrollo de infraestructura de gestión energética (UPS), soluciones de temperatura y espacio (gabinetes).
“En este escenario, se espera de los proveedores mayor flexibilidad, seguridad y consolidación en su oferta de infraestructura, cuyo eje central debe proveer la capacidad de enlazar los sistemas on premise de sus clientes, con las aplicaciones en la nube, para aprovechar de una forma más eficiente los datos y la tecnología y agregar valor al negocio”.
En opinión de Vargas González, la habilitación de centros de datos para una empresa, gobierno, o como servicio de proveedor de servicios de nube, ha detonado en México el crecimiento de las inversiones para ampliar las capacidades de cómputo local, debido a la necesidad de reducir la latencia en las operaciones y mejorar los niveles de servicio para miles o millones de usuarios de servicios digitales.
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