El desarrollo de las comunicaciones inalámbricas ha generado innumerables beneficios a la población en diferentes ámbitos que van desde lo laboral, lo educativo, comercial, en la salud y en muchos otros aspectos de la vida cotidiana; sin embargo, es importante admitir que también ha traído temores a la población, particularmente en lo relacionado a su exposición a elementos como las Radiaciones No Ionizantes (RNI) y Campos Electromagnéticos (CEM).
Por ello, tanto gobiernos, entidades reguladoras, así como organizaciones multilaterales realizan esfuerzos para informar con oportunidad a la población la forma en que está expuesta a los niveles de RNI y de los CEM, así como evitar que se excedan los niveles máximos permitidos por las autoridades y especialistas en la materia.
En el foro “Gestión Percepción de Riesgo en Radiación No Ionizante, organizado por TES América”, Reyna Ubeda, Asesora de la Comisión de Estudios 5 de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), precisó que en esta entidad trabaja talento especializado en Tecnologías de la Información la Comunicación (TIC) y en elaborar normas técnicas y estándares internacionales en la materia.
La Comisión de Estudios 5 sobre Medioambiente, cambio climático y economía circular, explicó, tiene entre muchas otras tareas, elaborar estándares (Recomendaciones) y diversas metodologías para llevar a cabo las mediciones sobre los Campos Electromagnéticos (CEM) que se generan en diferentes equipos de las TIC.
Como ejemplo citó la Recomendación K100 que aborda la metodología idónea para medir los CEM de radiofrecuencia para determinar el cumplimiento de los límites de exposición humana cuando se instalan equipos en una radio estación base.
La Recomendación K52 que determina orientaciones para que las instalaciones de las telecomunicaciones y terminales móviles cumplan los límites de exposición humana a los CEM.
Muy conocida en la región de América Latina, está la recomendación K83 relacionada con la intensidad de los CEM y que ofrece orientación sobre cómo realizar mediciones a largo plazo para supervisar zonas seleccionadas, y vinculadas a manifestaciones de “preocupación pública”, con el objetivo de ofrecer a la población datos claros sobre los niveles de CEM y resultados de mediciones continuas.
De igual forma también se cuenta con recomendaciones relacionadas con las técnicas de mitigación que los operadores de telecomunicaciones deben utilizar para reducir los niveles de radiación de los campos electromagnéticos y cumplir los límites de exposición.
La UIT realizó un informe sobre Campos Electromagnéticos (CEM) y su vínculo con la salud, en el cual se buscó que además de amigable para los usuarios de las Telecomunicaciones, estuviera traducido en los seis idiomas oficiales de la organización (español, chino, inglés, francés, ruso y árabe) y complementarse con una aplicación móvil (EMF), la cual ofrece información sobre cómo evitar la exposición humana a estos campos y actualizar incluso esta información con nuevos lineamientos para 5G.
“Está disponible (http://emfguide.itu.int) o en Play store de Google, así como en el sitio de aplicaciones de Apple para ios. Se realizan foros con los gobiernos para hacerles llegar la información detallada a la población, al ser esta la primera que manifiesta temores sobre las antenas o las Radiaciones No Ionizantes (RNI), se les informar y se les hace más conscientes sobre el tema, así es como la UIT trabaja”, explicó.
Esta labor de promulgación se realiza tanto con gobiernos como con el sector académico y sobre todo con entidades del sector privado. Adicionalmente la organización realiza un esfuerzo por difundir las acciones que los países en lo individual llevan a cabo, solicitando incluso a los países miembros que hagan conocer a la UIT sus prácticas y acciones en este tema para ser difundidas para que sus experiencias puedan ser útiles a otras naciones.
En la página de la UIT (https://www.itu.int/es/ITU-T/emf/Pages/default.aspx) se pueden conocer todas las actividades de la organización relacionadas con la Exposición de las personas a los Campos Electromagnéticos (CEM) causados por sistemas de radiocomunicaciones y equipos móviles.
Cuestionada sobre la conveniencia de manejar una política de datos abiertos para la difusión adecuada de toda la información relacionada con los campos electromagnéticos, y los RNI a las que se encuentra expuesta la población, destacó que puede funcionar como un esquema viable de respuesta para ofrecer la mayor cantidad de datos vinculada al tema.
Sin embargo, no es una tarea fácil debido a diversas complejidades técnicas, además de una falta de voluntad política, pero en la UIT se trabaja en la implementación de algunas recomendaciones en las cuales se le solicita a los Estados miembro que envíen sus mejores prácticas sobre las mediciones y quede disponible para el público en general.
En opinión de la experta, la comunidad internacional también debe liderar esfuerzos para concientizar e informar a la población sobre los riesgos asociados a las RNI, así como las diferentes iniciativas que se están poniendo en marcha.
C$T-EVP