La operación de Telefónica Movistar en México no depende de AT&T, ni de ninguna de las empresas con las que ha establecido alianzas para llevar a un nuevo nivel la compartición de infraestructura como una práctica disruptiva que genera beneficios tangibles para los usuarios de servicios de telecomunicaciones, aseguró Ana de Saracho, directora de Asuntos Públicos, Regulación y Negocio Mayorista de Telefónica Movistar México.
En noviembre 2019, Telefónica Movistar firmó un convenio de largo plazo de acceso a capacidad de última milla inalámbrica con AT&T México, firma que le provee capacidad en su red de acceso en 3G, 4G y cualquier tecnología de red futura a nivel nacional, como 5G.
“No dependemos en ningún otro sentido de AT&T, ni de ninguno de nuestros acuerdos. Para nosotros es uno más de una estrategia de alianzas que nos ayuden a crecer de una forma más sostenible, a enfocar inversiones, lograr mayor conectividad. Son estrategias de compartición de infraestructura”.
Este modelo operativo, dijo, permite a la firma mantener sus propios convenios de interconexión, utilizar acuerdos de Usuario Visitante, esquemas Multi-Operator Core Network (MOCN) o cualquier otra forma de compartición de infraestructura pasiva y activa con otros operadores mayoristas, ya que en ningún caso tiene acuerdos de exclusividad.
“Vamos a empezar a ver cada vez más formas de compartir infraestructura y no por eso dejaremos de ser un operador móvil. Lo que hoy deja ver esta conversación es lo disruptivo que ha sido nuestra decisión de operar así… Tenemos roaming nacional e internacional, OMVs, convenios de interconexión, concesión única, un mercado minorista que atender y es nuestro, otras estrategias con otros operadores y nada de eso nos ubica como un OMV”.
Además, detalló Ana de Saracho, la empresa continúa prestando servicios mayoristas a Operadores Móviles Virtuales (OMVs), un dinámico mercado donde ofrece servicios a cuatro de las firmas más grandes del país.
“Tenemos siete OMVs, sería raro que seamos nosotros un OMV. Tenemos nuestra concesión. Sí, renunciamos al espectro móvil pero esto fue una situación para generar inversiones eficientes. Hoy estamos concentrados en convertirnos en digitales. No, nos hemos convertido en ningún OMV”.
Reunida con medios de comunicación, la ejecutiva refirió que así como en 2019 se estableció la alianza con AT&T, desde hace cinco años sostiene un convenio de Roaming Nacional con Telcel con el cual extiende su oferta de voz y datos a otras zonas en las que no cuenta con cobertura propia.
Asimismo, recordó que en febrero de 2021, Telefónica Movistar firmó un acuerdo de Roaming Social con Altán Redes para llevar sus servicios a las comunidades menos favorecidas utilizando la Red Compartida.
“Optamos por la opción de RAN Sharing (MOCN) que nos permite mayor granularidad de cobertura. Decidimos en una primera fase llevar esta tecnología a 49 sitios operativos de Altán que atienden a mil 757 localidades beneficiando potencialmente a más de 181 mil personas. Estamos a punto de concluirla y la segunda fase corre de noviembre a febrero donde estaremos sumando 40 sitios”.
Para la directora de Asuntos Públicos, Regulación y Negocio Mayorista de Telefónica Movistar México, la empresa está en posición de consolidarse como una empresa “challenger” que desde su llegada a México ha puesto las bases de la conectividad, la transformación digital y la democratización de la tecnología.
“Lo que hoy deja ver esta conversación es lo disruptiva que ha sido nuestra decisión de operar así. En un mercado tradicional quizá se vea distinto, pero nos vamos a empezar a acostumbrar a modelos mucho más disruptivos en el mercado”.
C$T-GM