Debido a la política fiscal “miope, cortoplacista y errónea” en materia de costos de espectro radioeléctrico, el erario mexicano ha dejado de percibir 13 mil 600 millones de pesos desde 2020, situación que también alimenta peligrosamente un escenario de monopolio, en un sector donde autoridades, comisiones legislativas e incluso el órgano regulador, se observan disminuidos.
Es por ello que, más que educar, convencer o enseñar a los servidores públicos, los integrantes del Instituto del Derecho de las Telecomunicaciones (IDET) se propusieron “hacerles la tarea” trabajando en una propuesta que muestre cuál sería la tasa óptima de recaudación, y que al mismo tiempo permitiera al sector de las telecomunicaciones ser competitivo, rentable y beneficie a la mayoría de los usuarios.
En conferencia de prensa para reiterar el llamado a las autoridades hacendarias de revisar a la baja los derechos por el uso del espectro radioeléctrico, en el contexto de la próxima presentación del Paquete Económico 2024 a la Cámara de Diputados, integrantes del IDET explicaron el contexto que prevalece en el país.
Y es que, en México los operadores pagan más que en cualquier otra parte por usar el espectro, pues los derechos anuales representan 89 por ciento del costo total de este importante recurso, mientras que en España se paga 51 por ciento; en Portugal, 48 por ciento y en países como Alemania, Suecia Austria, Dinamarca y Países Bajos, se hace un pago inicial único, y nada más, precisó Gonzálo Rojón, director & Senior Partner en The CIU.
Añadió que esto propicia que los operadores de telecom en México enfrenten una elevada estructura de costos, pues el pago de derechos les exige entre 22 y hasta el 30 por ciento de sus ingresos, cuando en otros países, esto representa entre 1.0 y el 13 por ciento cuando mucho, precisó.
Ernesto Piedras, integrante del IDET, indicó que hace 10 años, antes de la reforma en telecomunicaciones, había cinco operadores de telecomunicaciones y actualmente, sólo quedan dos, pero es el Agente Económico Preponderante en Telecomunicaciones (AEPT) que en servicios móviles, concentra 82 por ciento de los ingresos de este mercado.
A este escenario se suma el hecho de tener una Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), donde se suprimió una instancia clave: la subsecretaría de Telecomunicaciones; y en el Congreso de la Unión se tienen comisiones en la materia, que no son tan fuertes y activas como lo eran antes, además de un Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) cuyo Pleno está incompleto (opera sólo con cuatro Comisionados).
Tras reiterar “su llamado a las autoridades hacendarias para que revisen a la baja los niveles de las distintas cuotas de derechos actualmente establecidas, así como también la estructura de las mismas, pues se cobra lo mismo por distintas bandas sin considerar sus diversas y diferentes características técnicas”, Gerardo Soria, presidente del IDET, sostuvo que existen posibles salidas a este esquema que de prevalecer retornaria al sector al monopolio que prevalecía antes de la reforma de 2013.
“Legalmente, la Ley de Vías Generales de Comunicación está vigente y a través de ella el Instituto Federal de Telecomunicaciones podría argumentar en una Controversia constitucional, que se cobre un porcentaje del uso del espectro, en lugar de los costos fijados a través de la Secretaría de Hacienda, pero otra vez, le tiemblan los pies para hacerlo”, advirtió.
La otra opción sería que el propio Ejecutivo Federal presentara una controversia constitucional, pero evidentemente eso no va a ocurrir y por el contrario, se insiste en el esquema de mantener los costos del espectro muy altos, lo cual fortalece la probabilidad de que crear un monopolio.
“Es una realidad que puede darse si el gobierno sigue con la necedad de vernos a los ciudadanos como a la vaca que hay que ordeñar en materia fiscal y no como sujetos de derechos”, advirtió.
Gerardo Soria advirtió que lamentablemente, los burócratas y políticos “en lugar de acumular experiencia acumulan ignorancia y cuando llegan al poder quieren inventar el hilo negro y el gua tibia”.
Desde tiempos del ex presidente Vicente Fox (2000-2006), se abrazó la idea de meter en la Ley Federal de Derechos el uso del espectro, lo que llevó a absurdos legales como tener pagos diferenciados, por los mismos servicios en igual volumen e incluso orilló a realizar «subastas simuladas» que no reflejan la realidad del mercado.
Recordó que el espectro radioeléctrico no es un bien que se pueda guardar para usarlo después, como se ha querido hacer crecer. “Querer ahorrarlo es tan estúpido como decir que los aerogeneradores le van a quitar el aire a los indígenas de Oaxaca”, dijo para graficar hasta qué punto no se ha entendido desde el Estado la naturaleza de este bien, al que se le quiere dar un fin recaudatorio que distorsiona el mercado.
Para explicarlo desde la perspectiva de los economistas, Ernesto Piedras, también director de The Competitive Intelligence Unit (CIU), dijo que por ejemplo, un barril de petróleo sí es un bien que se puede guardar o vender cuando así convenga en el mercado y no se puede hacer más con él una vez vendido.
A diferencia de este bien tangible, lo mejor que se puede hacer con el espectro radioeléctrico es usarlo inmediatamente y de manera intensiva, para darle la mayor utilidad posible.
En ese sentido recordó que el escenario de un monopolio “no es hipotético” pues en las telecomunicaciones en general, el sector móvil representa 6 de cada 10 pesos y de eso, el 70 por ciento corresponde al AEPT.
El agente preponderante en telecomunicaciones, sostuvo, “vive un caso ideal de semi monopolio donde la competencia parece una simulación, con ingresos más altos y márgenes de ganancia más altos que los demás. Si esto no es un escenario de monopolio, por lo menos lo es de ser los grandes ganadores de la ruleta de las telecomunicaciones”.
De hecho, van creciendo las voces que se unen a la preocupación por los costos del espectro. Ya no se limita sólo a los operadores, sino también a fabricantes de equipos y a organismos internacionales como la OCDE, ASIET y GSMA e incluso en su reciente visita a México, la secretaria de Comercio de los Estados Unidos, Gina Raimondo, que también señaló su preocupación por la metodología que se usa en México para fijar el costo de este insumo básico.
C$T-GM