El espectro es el corazón de la conectividad.
Contrario a lo que plantea el gobierno federal, la transformación digital de México está en entredicho, con una propuesta legislativa que pretende aumentar el costo del espectro radioeléctrico y que atrasaría la llegada al país de la tecnología 5G, y que afectaría derechos de acceso digital, a internet y a servicios de telecomunicaciones.
“El silogismo es sencillo, si no hay infraestructura y espectro radioeléctrico no hay derechos fundamentales y economía digital, innovación y competitividad, infraestructura digital, no hay desarrollo. No se combate a la pobreza, no hay telecomunicaciones, no hay TIC, no hay bienestar digital y se transforma la inclusión digital en una política institucional de exclusión digital”, dijo a senadores Jorge Fernando Negrete, presidente del Grupo Digital Policy & Law.
Reunido con los legisladores en el Primer Foro Virtual “Análisis de los Criterios Generales de Política Económica 2021 y reformas a la Ley Federal de Derechos”, el analista admitió que el Ejecutivo federal tiene razón cuando dice que conectar las zonas rurales no son negocio, pues “no se puede hacer un negocio sostenible ni socialmente responsable con los precios de espectro radioeléctrico más caros de América Latina y entre los más caros del mundo”.
Sin embargo, recordó otra aseveración del presidente de la República, respecto a que no se incrementarían los impuestos durante su gobierno, y que con la propuesta que hizo la Secretaría de Hacienda “a los precios más caros de América latina y que han generado marginación digital se les incrementa”.
“Si la finalidad de las políticas de pago de derecho son crear incentivos para garantizar el uso eficiente del espectro, fomentar la inversión y el despliegue de infraestructura, crear incentivos para garantizar el uso del espectro, fomentar servicios móviles en todo el país y garantizar un precio razonable a los usuarios, entonces la propuesta de incremento del precio del espectro va en sentido contrario”, recalcó.
Incluso, recordó que estudios del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) han arrojado la misma conclusión: que los precios del espectro son los más altos, y lamentó que esto surja cuando el mundo vive por primera vez una coyuntura en la que el ecosistema digital en su conjunto, con dispositivos móviles, infraestructura de telecomunicaciones y empresas digitales están interactuando con un solo objetivo: preservar el bienestar digital y neutralizar la marginación digital.
Así, con el incremento a los derechos del espectro se acelerará la desconexión, se cancelará el despliegue de infraestructura, se inhibirá el derecho de acceso a internet, se incrementarán tarifas, caerá la calidad del servicio, habrá falta de innovación y se descapitalizará al sector.
Jorge Fernando Negrete refirió que CFE Telecomunicaciones cuenta para este año con dos mil millones de pesos para conectar a más de 35 millones de mexicanos en 2021; aunque con esa propuesta de Hacienda, estimó, no logrará su cometido, toda vez que “43.6 por ciento de la población no tiene internet y 44.3 por ciento no tiene computadora”.
“5G necesita tres veces más inversión que 4G, incrementar el precio del espectro es atacar el corazón de la conectividad y de una sociedad digital, y sobre todo es condenar a los más pobres de nuestro país al universo injusto de la marginación digital”.
Para el experto es tiempo de relanzar la economía digital que nos propone el T-MEC y la vecindad con Estados Unidos, incorporarnos al mundo 5G para todos, no sólo para algunas cadenas productivas, y pasar de una sociedad agrícola e industrial a una sociedad digital y más justa e incluyente.
C$T-GM