La información médica es un activo fundamental.
A lo largo de su vida, una persona genera alrededor de 300 libros de información médica; sin embargo, 80 por ciento de los datos son invisibles para los sistemas actuales debido a que carecen de una estructura que permita su recopilación, ingreso y administración eficiente, lo cual es sin duda uno de los grandes desafíos que enfrenta el sector salud en la actual era digital.
«En América Latina, los sistemas de salud se esfuerzan por alcanzar nuevos niveles de atención colaborativa. Un sistema de información de salud es más que una colección de registros de salud electrónicos, intercambios de información, flujos de trabajo y sistemas administrativos», señala Bill García, director de Vertical de Healthcare en Ricoh Latin America.
En opinión del especialista, la enorme cantidad de información que genera cada paciente es de gran relevancia estratégica para su atención médica, su uso y manejo puede provocar que las tareas diarias de los profesionales de la salud sean complejas, burocráticas, y que tengan un impacto directo negativo en su desempeño y la experiencia de los pacientes.
«Se trata de personas que se comunican con otras personas. El denominador común que vincula conceptualmente todos estos silos es el documento. El desafío es integrarlos de una manera rentable, pero valiosa y flexible».
Para Bill García, las interfaces digitales para conectar los sistemas electrónicos de las diferentes partes son en muchos casos prohibitivamente caras para que las organizaciones médicas las adquieran e implementen, lo cual se suma a la problemática de que exista un gran volumen de documentos históricos como las notas de los médicos, los resultados de laboratorio o las imágenes que nunca hayan sido escaneado.
En este escenario, la tecnología cognitiva juega un rol fundamental pues una de sus principales características es facilitar y permitir a los profesionales de la salud acceder a la información que necesitan para realizar su trabajo de manera efectiva.
«RICOH Smart Doctor es una plataforma cognitiva, diseñada para agilizar y eficientar las tareas diarias de los médicos. Esta solución puede recibir información en lenguaje natural para analizar y asignar códigos a condiciones médicas y sugerir un diagnóstico, basado en CIE10 (acrónimo de estándares internacionales de clasificación de enfermedades)».
Esta herramienta también es capaz de mejorar la calidad de los registros clínicos, simplifica el proceso de recuperación de información y realiza análisis estadísticos. Además, muestra los datos médicos de una manera estructurada a través de una aplicación de celular y se puede acceder con los principales navegadores del mercado.
«Con la tecnología de IBM Watson Explorer Content Analytics, RICOH Smart Doctor entiende el contexto, lleva a cabo la parametrización, se integra con el glosario médico, codifica la información relacionada con el caso y brinda sugerencias al médico. La solución cuenta con Hardware y Software, Instalación, Mantenimiento y Servicios Profesionales».
Una gran cantidad de organizaciones de atención médica, añadió el directivo, se han centrado en la conectividad de dispositivos; sin embargo, resulta clave conectar personas y flujos de trabajo para lograr una verdadera interoperabilidad.
«Para alcanzar el máximo potencial, los profesionales de la salud deben ser capaces de colaborar con colegas en cualquier lugar y momento. Esto significa hacer que la información empresarial y los repositorios de datos estén disponibles donde y cuando se necesiten».
C$T-GM