Agregar a grupos y enviar cadenas, de las peores prácticas
Con 33.9 millones de usuarios, Whatsapp es la plataforma de comunicación móvil más popular en México, a través de la cual cada minuto se envían saludos, se concretan citas, se cuentan chistes y hasta se hacen negocios.
Es claro que esta aplicación de mensajería instantánea para teléfonos inteligentes es parte de la vida diaria de cualquier persona con acceso a internet, y por ello es importante seguir ciertas normas de conducta que evitarán que seas considerado “non grato”.
1.- Agregar a alguien a un grupo sin avisar. Quizá esta sea la primera regla de etiqueta que por simple sentido común deberíamos seguir. Para empezar, el número telefónico es información personal y cada persona tiene el derecho a decidir con quién lo comparte. Cuando alguien tiene la gran idea de meternos a un grupo de Whatsapp sin decir “agua va”, nos expone a establecer contacto con gente que quizá no conocemos o con quienes simplemente no queremos tener relación, lo cual provoca perder el control de la situación y definitivamente odiar a quien tomó la decisión.
2.- Establecer primer contacto por esta vía sin una presentación previa. Conoces a alguien, te da su número celular y de buenas a primeras te le apareces en Whatsapp con el clásico “Hola cómo estás”, sin tomarte la delicadeza de identificarte. La pregunta aquí es ¿qué te hace pensar que la otra persona guardó tu número en su celular y ya sabe quién eres?.
3.- Comentar la fotografía que tiene tu contacto en su perfil. Esta norma puede sonar quisquillosa, pero aplica si la persona con quien estás tratando es un cliente, un superior en tu medio laboral o alguien con quien no tienes un alto grado de confianza. Tener bien claro el límite entre lo personal y lo profesional ayuda a evitar malos entendidos.
4.- Enviar cadenas, memes o chistes si no existe tal confianza. Cada vez es más común dar los buenos días por Whatsapp a amigos y familiares, enviar un meme con un chistecillo para alegrar el día o compartir un mensaje filosófico por esta vía; sin embargo, no a todas las personas les gusta recibir este tipo de contenido sobre todo cuando no se tiene una relación muy cercana y porque estas imágenes son almacenadas en la memoria del dispositivo, llegando a saturarla.
5.- Hacer capturas de pantalla de conversaciones.. y te descubran. La discreción es un valor que no pasa de moda y si alguien te dice algo por Whatsapp esa persona asume que se trata de una plática privada, hacer capturas de pantalla para comentar lo dicho con otras personas no hace honor a la confianza y te podría meter en un buen lío.
Si bien el comportamiento en las plataformas de mensajería instantánea y las redes sociales tiene sus propias características, hay algunos hábitos que no deberíamos dejar de lado en pro de la sana convivencia y por una comunicación más efectiva.
C$T-GM