En el primer semestre de este año llegaron a nuestro país 30 mil millones de dólares de Inversión Extranjera Directa (IED), debido al fenómeno de la relocalización, también conocido como “nearshoring”, mientras que numerosas empresas internacionales han hecho anuncios de futuras inversiones por hasta 70 mil millones de dólares en los próximos dos o tres años.
Y al mismo tiempo, México cuenta con una “producción” de hasta 451 mil egresados anuales de licenciaturas y carreras técnicas universitarias que pueden darle vida a estas industrias y de los cuales hasta 37.5 por ciento son egresados de carreras de ciencias, tecnología, ingenierías y matemáticas, conocidas por sus siglas en inglés STEM.
Iraís Barreto Canales, titular de la Unidad de Inteligencia Económica Global de la Secretaría de Economía, destacó que México ha recibido la confianza de al menos 300 grandes empresas internacionales que han decidido invertir para relocalizar sus operaciones, porque existe un buen ambiente para invertir y porque el país cuenta con el talento necesario que, advirtió, “no vamos a volver a llevar hacia modelos maquiladores”.
Al participar en la presentación de las memorias de la Cumbre de Educación Superior y de Alta Tecnología, la funcionaria explicó que uno de los principales retos en México es garantizar la formación de talento en temas como las industrias eléctrica, electrónica y de semiconductores; automotriz y de electromovilidad; agroindustrial; de dispositivos médicos e industria farmacéutica, para garantizar el auténtico desarrollo del país y no volver a caer en modelos donde no había generación de conocimiento y tecnología.
Explicó que este trabajo no es únicamente de México, sino que forma parte de los compromisos del Diálogo de Alto Nivel con autoridades de Estados Unidos, que ven en nuestro país una gran oportunidad para fortalecer la potencia de la región de América Latina para competir con el resto del mundo en esas materias, entre otras cosas por la formación de su talento especializado.
Durante el mismo evento celebrado en la sede del Centro de Innovación y Desarrollo de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), Luciano Concheiro Bórquez, subsecretario de Educación Superior de la SEP, señaló que durante la Cumbre de Educación Superior y de Alta Tecnología, celebrada en mayo pasado, se inició el trabajo para fortalecer a las industrias de alta tecnología y a los trayectos profesionales de los jóvenes para superar la histórica distancia que hubo entre el mercado laboral y las instituciones de educación superior.
La inversión que viene hacia México, debe encontrarnos con una visión estratégica para proveer lo necesario, incluyendo incrementar el número de especialistas en materias STEM, pues hoy en día hay 342 mil mexicanos en empresas de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) “y la demanda de profesionales especializados crece a ritmos nunca antes vistos”.
En ese sentido, “debemos entender que somos responsables de generar talentos altamente capacitados y especializados que cumplan con las necesidades presentes de las industrias, tengan capacidad de crear nuevos modelos de negocio, nuevos productos y maneras de general el crecimiento industrial que responsa a las necesidades de los entornos, pero sobre todo, que sean capacidad de seguirse formando toda su vida”.
A su vez, Enrique Yamuni Robles, presidente de la Cámara nacional de la Industria Electrónica, de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (CANIETI), destacó que esta primera Cumbre se realizó con la idea de atraer, formar y retener talento mexicano para el crecimiento y la relocalización donde “no sólo la tecnología sufre cambios gigantescos”, sino que todas las industrias observan el mismo fenómeno y por ello presentó algunas propuestas concretas para fortalecer la formación de estudiantes.
En primer lugar, debe incorporarse la enseñanza del idioma inglés en todos los niveles de la educación, tanto pública como privada y se debe incrementar el presupuesto para educación, que en 2022 representó el 3.1 por ciento del PIB, mientras que en 2023 esa relación bajó al 2.9, su nivel menor en la última década.
Si bien para el 2024 este porcentaje mejoró ligeramente, el incremento todavía no es significativo y se requiere mejorarlo, pues más presupuesto “puede garantizar mayor inclusión, democratización y excelencia en la educación”.
Incluso, propuso dar en comodato una computadora a cada estudiante desde tercero o cuarto de primaria y hasta la preparatoria (al menos) y subsidiar el costo del internet de banda ancha móvil a familias de escasos recursos y personas vulnerables.
“Hace más provecho –por mucho—un programa de entrega de computadoras y subsidio de banda ancha, que algunos programas sociales que tenemos actualmente, sin que eso quiera decir que éstos se suspendan; sólo se deben redireccionar, tomando en cuenta la relevancia de la educación”, señaló.
Adelantó que entre el último trimestre de 2023 y el primero de 2024, se llevarán a cabo cumbres regionales (similar a la efectuada en mayo pasado), pero con un sentido más local, empezando desde la que se celebrará a finales de noviembre en Yucatán y a la que seguirán otras en los estados de México, Jalisco, Nuevo León y Sonora, a los que se pueden sumar más entidades, pues nada “está escrito en piedra”.
Finalmente, para ilustrar las posibilidades que se tienen en materia de semiconductores, explicó que cuando la pandemia generó la crisis en este particular, las operaciones se movieron hacia “un lugar más seguro”, que fue Israel, el cual –desgraciadamente—ahora ha probado “no ser tan seguro”, pues en realidad mantiene conflictos desde hace cientos de años y por lo tanto México podría ser una opción mucho más viable.
C$T-GM