A diferencia de otros países, donde el interés más importante para las mujeres en el ámbito laboral es contar con un buen ambiente en el trabajo, en México lo más relevante para ellas es acceder a un sueldo competitivo, tener una sensación de desarrollo profesional y gozar de flexibilidad laboral, especialmente, porque la interrupción de carreras laborales tiene el doble de incidencia en las mujeres que en los hombres y en su mayoría está ligada con la maternidad.
De acuerdo con la “Radiografía Mujeres en el Trabajo” elaborada por Buk, empresa que ofrece una plataforma digital de gestión de recursos humanos en la modalidad de software como servicio (SaaS, por sus siglas en inglés), en los cuatro países de América Latina estudiados (Chile, Colombia, México y Perú), “las mujeres siguen teniendo más obstáculos para lograr un desarrollo profesional que las haga sentir satisfechas”, sin importar la rama industrial en la que se encuentren.
En este sentido, la encuesta levantada entre más de mil 600 personas (de ambos géneros) en los cuatro países, reveló que “las mujeres interrumpen su carrera profesional por razones familiares en el 72 por ciento de los casos, mientras los hombres lo hacen por motivos de desarrollo profesional (35 por ciento para estudiar) o por motivos personales (26 por ciento por ocio y 11 por ciento para cuidar su propia salud)”.
El estudio revela también que la maternidad es uno de los principales factores por los que las mujeres interrumpen sus carreras, lo cual, evidentemente, no pasa con los hombres, aunque ellos también sean padres o tengan hijos durante el tiempo en que desarrollan carreras profesionales. “Además, a medida que avanzan en su carrera profesional, las mujeres aumentan en mayor medida sus labores domésticas y de cuidado”.
En el caso de México, donde se entrevistó a 195 personas empleadas de diversas industrias (64 por ciento mujeres y 36 por ciento hombres) en su mayoría entre 20 y 40 años de edad, se observó que 60 por ciento de las personas piensan que sus empresas están comprometidas con la equidad de género, cifra mayor a la de Chile (con 50 por ciento), pero menor a la de Perú (con 63 por ciento) y Colombia (con 67 por ciento).
A diferencia del resto de los países donde las mujeres marcaron inequívocamente el ambiente laboral como su principal prioridad, en México, ellas consideraron que el salario competitivo y los incentivos económicos son lo más relevante (64 por ciento), mientras la flexibilidad laboral y el trabajo remoto, fueron otra de las prioridades importantes (49 por ciento), al igual que la capacitación y las oportunidades de crecimiento profesional, con un porcentaje similar.
Por supuesto, el ambiente laboral tiene relevancia para las mujeres en México (46 por ciento), pero en el resto de los países ése fue sin duda el principal factor, con porcentajes superiores al 60 por ciento en todos los casos.
Respecto al desarrollo en el trabajo, para las mujeres en México la prioridad es clara: 52 por ciento de ellas dijeron que lo más importante es saber que se están desarrollando y creciendo profesionalmente a diario; seguido de la certeza de poder trabajar cuándo y dónde quieran, mientras cumplan sus objetivos; y contar con un salario mejor que el promedio del mercado (ambos factores con 39 por ciento), mientras que la estabilidad laboral es también una preocupación importante para el 38 por ciento de ellas.
Al respecto, recientemente Gabriela Rocha, cofundadora de Laboratoria, organización dedicada a capacitar mujeres para insertarse laboralmente en la industria digital, señaló que mientras las promociones en el nivel gerencial se dan en proporción de dos hombres por cada mujer.
En niveles directivos la balanza se desequilibra gravemente, pues sólo una mujer accede a esos puestos por cada 10 hombres, lo que en muchos casos tiene que ver tanto con la maternidad como con los cuidados domésticos.
Este dato concuerda con la visión que las mujeres tienen sobre el tiempo que han de permanecer en el trabajo, pues 74 por ciento aspiran a quedarse en sus empleos entre dos y cinco años o más de cinco años.
Las diferencias de género son mucho más dramáticas, cuando se estudian las razones de la interrupción laboral: 14 por ciento de los hombres interrumpió su carrera por más de seis meses, mientras el porcentaje entre las mujeres en este indicador fue del doble (28 por ciento).
De manera clara, el nacimiento de los hijos es la razón para que ellas interrumpan sus carreras (23 por ciento en mujeres, cero por ciento en hombres); seguido de la capacitación donde 14 por ciento de las mujeres lo hace contra 30 por ciento de los hombres.
Sin embargo, interrumpir la carrera profesional para dedicar tiempo al ocio, como viajes o simple descanso, parece ser un privilegio masculino, pues 40 por ciento de los hombres lo hizo, contra sólo 17 por ciento de las mujeres.
Por otra parte, las tres principales razones por las que las mujeres renuncian a sus trabajos en México son: tener salarios poco competitivos (46 por ciento); buscar mejores oportunidades laborales (45 por ciento) y falta de oportunidades de desarrollo (38 por ciento).
C$T-GM