Cuatro de cada 10 personas sufren un tipo de discapacidad.
La pandemia ha resultado un entorno desafiante para todas las personas, especialmente para las que tienen alguna discapacidad y deben continuar sus actividades cotidianas, sumando ahora las dificultades que impone el distanciamiento social, ahondando las brechas para su plena inclusión en la sociedad.
En el marco del Día Internacional de las Personas con Discapacidad, que se conmemora cada 3 de diciembre, y ante la emergencia que generó el confinamiento sanitario al que obliga el Covid-19, el tema de la tecnología como habilitador de otros derechos recobra importancia en el sector privado.
Es así que diversas empresas, a través de diferentes estrategias, se ocupan de mantener a la inclusión y a la diversidad como sus valores cuando se trata de contratar personal, actuando contra las resistencias que persisten debido a prejuicios, ignorancia o a la imposibilidad de modificar espacios en oficinas.
En una videoconferencia, Daniel Ríos Villa, vicepresidente adjunto de Asuntos Externos de AT&T México, aseguró que la tecnología es el mejor aliado para las personas con discapacidad, porque ayuda a recuperar en buena medida la autonomía, lo que tendrá aún mayor impacto con el Internet de las Cosas (Iot), que promete dar un impulso muy importante al cierre de la brecha de accesibilidad.
“No es casualidad que en la última década millones de teléfonos inteligentes o tabletas conectadas a internet han facilitado el uso de aplicaciones enfocadas a la descripción del entorno, lectores de texto, transcripciones en tiempo real de conversaciones, tecnologías que se dedican a reconocimiento de voz para personas con debilidad visual o auditiva y que hacen más fácil la vida de quienes las usamos”.
En AT&T, indicó el ejecutivo, se trabaja con personas que están dentro del espectro autista, “y hemos descubierto que probablemente hoy nuestro científico de datos es alguien que está en esta condición”, y lo que se está buscando es que personas así, tengan una trayectoria y desarrollo laboral.
El reto es importante, sobre todo cuando se considera que cuatro de cada 10 personas sufren algún tipo de discapacidad, y reciben 30 por ciento menos ingresos que cualquier otra persona que realiza una actividad similar, destacó Ríos Villa, quien padece degeneración macular que le impide una agudeza visual al 100 por ciento.
Paulina López, directora de Diversidad e Inclusión de Dell para Latinoamérica, reconoció que los empleadores aún tienen muchos prejuicios respecto a las personas que tienen alguna discapacidad.
Por ello en Dell existe capacitación, una sesión de 3-4 horas, para sensibilizar a los trabajadores sobre temas como diversidad, inclusión y micro agresiones; todos los empleados a nivel global deben completar el curso, pero además, se toman en cuenta las discapacidades denominadas como invisibles, como es el caso de la depresión.
Jonathan Chacón, ingeniero de Software accesible en Cabify, quien tiene discapacidad visual total, reconoció que hay barreras que se crean los propios trabajadores o la compañía cuando no saben tratar con personas con discapacidad, y por el otro lado es difícil encontrar a personas con esta condición que sepan de software, por ejemplo. No obstante, “el único camino para conseguir una sociedad totalmente inclusiva es utilizar la tecnología”.
Cabify se preocupa por la inclusión y accesibilidad porque va muy de la mano del concepto de la sostenibilidad, y “el tema de hacer algo sostenible es pensar en todas las personas, aquí estamos hablando de personas con discapacidad, pero estamos olvidando un concepto muy importante, que en cualquier momento, con el envejecimiento todos terminaremos siendo personas con discapacidad”.

Gabriela Medina, directora de Responsabilidad Social en ManpowerGroup, consideró que para abrir camino en la inclusión, las empresas primero deberían quitarse el miedo, porque contar con personal con capacidades diferentes es un círculo virtuoso, pues se otorga empleo digno y se cuenta con gente altamente comprometida.
“Es una excelente estrategia, porque si atraes personas con diferentes características entienden mejor al mercado, aportan, y como han sido tan discriminados aprovechan muy bien las oportunidades…no se trata de altruismo, de cubrir una cuota o lograr un distintivo, sino de implementar una cultura de sensibilización.”.
Alejandra Ramírez, directora de Comunicación de Intel para México, indicó que en esta compañía tendrán como meta incluir como empleados a 11 mil personas auto identificadas con alguna discapacidad, lo que representará el 10 por ciento de la plantilla que sostienen a nivel global.
Esto implicará realizar adaptaciones de infraestructura, pero “en Intel estamos sumamente comprometidos con el empoderamiento de personas con diversas habilidades y lo hacemos con la ciencia y tecnología. Tenemos esto dentro del ADN”, y estamos convencidos de que a través de la tecnología podemos cambiar el mundo y mejorar las condiciones de las personas con discapacidad.
Teresa Cid, directora de Comunicación y Relaciones Públicas en General Motors coincidió en las dificultades que tienen las personas con discapacidad para incorporarse al mercado laboral, por ello la firma trabaja en un programa de diversidad y de inclusión; desde 2011, cuando se decidió romper paradigmas sobre todo en el área de manufactura, al reestructurar algunos procesos para atraer talento de personas con discapacidad, sensibilizar a los equipos de trabajo a través de cursos, incluso con lengua de señas, con lo que se ha logrado una muy buena integración.
C$T-EVP