La delincuencia basada en criptodivisas, que alcanzó un nuevo máximo histórico en 2022 al superar los 20.6 mil millones de dólares, sigue viendo a la estafa como la principal forma de obtener ganancias a costa de las víctimas que caen en sus diversas modalidades, de acuerdo con el Reporte de Criptocrimen 2023.
El documento elaborado por Chainalysis, detalla que aún con la significativa caída que registraron las estafas, al pasar de 10.9 mil millones de dólares en 2021 a 5.9 mil millones de dólares en 2022, esta actividad ilícita sigue siendo la mayor forma de delincuencia basada en criptomonedas.
“Atribuimos la mayor parte de este descenso a las condiciones del mercado, ya que el rendimiento de las estafas tiende a empeorar cuando los precios de las criptomonedas están en declive”.
América Latina, detalla el reporte, es una región muy atractiva para el cibercrimen, pues capta entre el 2.0 y el 11 por ciento de cualquier tipo de delito, entre los que se encuentran compras fraudulentas, actor u organización ilícita, ransomware, estafas y fondos robados.
A nivel regional, 62 por ciento de los ilícitos en los que están involucradas criptomonedas están relacionados con estafas, 28 por ciento con fondos robados, pero sólo 5.0 por ciento con el mercado negro, 1.0 por ciento en compras fraudulentas y 1.0 por ciento en ransomware.
El documento destaca que si bien las 10 principales estafas de 2022 fueron del tipo de inversión, que dominaron como categoría los ingresos totales por estafas el año pasado, las “estafas románticas”, en las que el defraudador finge una relación sentimental con la víctima para convencerla de que le envíe dinero, podrían considerarse las más “destructivas en términos de ingresos por víctima”, con un promedio de 15 mil 559 dólares.
Otra modalidad es la denominada “Giveaway scams” o “estafas de regalo”, con un promedio de mil 834 dólares, y con las que los defraudadores solicitan a las víctimas que les envíen criptomonedas, bajo la promesa de enviarles más a cambio. En este caso los estafadores se suelen hacer pasar por celebridades.
Asimismo, en las estafas de suplantación de identidad, que tuvieron un promedio de 5 mil 746 dólares por víctima, los delincuentes se hacen pasar por alguien en una posición de autoridad, para pedir el envío de criptomonedas para corregir algún tipo de problema.
En las estafas de inversión, que reportaron 995 dólares por víctima el año pasado, los delincuentes promocionan una empresa inversora falsa, prometiendo rendimientos descomunales.
Las estafas de NFT son otra modalidad mediante la cual los defraudadores engañan a las víctimas para que compren tokens falsos, diseñados para que parezcan colecciones más notables; en este tipo, el año pasado, las víctimas hicieron depósitos por 462 dólares en promedio.
Kim Grauer, directora de Investigación en Chainalysis. reconoció que se están registrando niveles sin precedentes de adopción de cripto en ciertas partes de América Latina, donde será importante la educación de los usuarios, para que conozca cómo funciona este nuevo activo, pero también para que sepan cómo cuidarse de las estafas.
En el reporte se destaca que el año pasado la consultora detectó alrededor de 14 mil millones en actividades ilícitas en 2021; en el presente reporte la actualización elevó la cifra a 18 mil millones, principalmente debido al descubrimiento de nuevas estafas criptográficas.
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