Se estanca la demanda de postpago.
Luego de sostener tasas de crecimiento de doble dígito y representar los planes de pospago el 18 por ciento de las líneas en operación en México, los usuarios retomaron su preferencia por la modalidad de recargas y el tercer trimestre de este año (3T19) el crecimiento anualizado de líneas en prepago alcanzó 3.4 por ciento, superando el aumento de 2.8 por ciento de los consumidores de planes por contrato, «situación que no tenía lugar desde el cuarto trimestre de 2013».
«El rebalanceo del mercado y la creciente preferencia de los usuarios hacia la modalidad de recargas se explica por diversos factores. En primer lugar, los operadores han lanzado agresivas ofertas comerciales en prepago, al ofrecer una navegación en Internet ilimitada, por lo que las ventajas económicas de tener un plan son cada vez menores», detalló Fernando Esquivel especialista de The Competitive Intelligence Unit (CIU).
El especialista de The CIU destacó que también se debe considerar que las empresas han llevado a cabo una estrategia de reducción de subsidios que ha sido reemplazada por una política de financiamiento de equipos. Aunado a esto, la entrada de operadores móviles virtuales, con ofertas de prepago enfocadas para nichos específicos, también ha abonado en el crecimiento de usuarios que realizan recargas.
En su análisis reciente Esquivel destaca que en México operan 123.4 millones de líneas, lo que representa una penetración de 97.4 por ciento de la población total del país, «masificación» imposible de haberse alcanzado sin la introducción de la modalidad de prepago (México es pionero en este esquema desde 1995), que no exige contrato o permanencia con una operadora, y que los usuarios pueden ajustar su consumo en razón de su ingreso y necesidades de comunicación por mes.
Hasta 2004 prepago creció a tasas de doble dígito, para perder terreno desde ese año frente al esquema de pospago que creció como resultado de la oferta de subsidios en la compra de dispositivos móviles y el lanzamiento de atractivos y abundantes planes de servicios, principalmente a partir de la entrada de teléfonos inteligentes y el uso de datos móviles.
«La tasa de crecimiento de los suscriptores de pospago duplicó a la de prepago, hasta que la ponderación de planes de contrato entre el total de líneas se estabilizó en un promedio de 18 por ciento, frontera que ha sido difícil de superar por los requisitos de bancarización solicitados en los planes», explicó.

Para el cierre del 3T19, el número de líneas en prepago fue de 101.1 millones, con una adición de casi 1 millón al mes, para representar 82.2 por ciento del total del mercado, mientras que en pospago sumaron 21.9 millones los suscriptores en activo o 27.8 por ciento del total, derivado de una tasa de crecimiento de 3.4 y 2.8 por ciento, respectivamente.
En opinión de Fernando Esquivel, la dinámica futura y reacomodo del mercado entre estas dos modalidades dependerá de factores como el escenario competitivo, la entrada de nuevos jugadores, el panorama económico y el avance de la bancarización; sin embargo la evolución al alza de una u otra derivará de la generación de una mayor y mejor canasta de consumo para el usuario final.
C$T-EVP