El desarrollo de las tecnologías de quinta generación (5G), más allá de ofrecer altas velocidades y menores niveles de latencia, busca tener un impacto social importante, como ejemplo de ello están las diversas pruebas que se realizan para que la innovación tecnológica se convierta en un pilar importante en momentos en que la ciudadanía debe enfrentar desastres naturales como sismos, terremotos y huracanes.
Ante este escenario AT&T en Estados Unidos, ha puesto en práctica alternativas tecnológicas como las denominadas burbujas de conectividad (Flying Cows) mediante las cuales se utilizan células portátiles para soportar las telecomunicaciones en zonas afectadas por desastres naturales, como tormentas tropicales o sismos.
“Con las Flying Cows es posible mantener comunicados a quienes se encuentran en la primera línea de emergencia y, en el caso de 5G, existe la ventaja de priorizar la comunicación de las personas al frente de labores médicas o de rescate, para facilitar su trabajo y la coordinación con sus equipos”, destaca en su análisis La Tecnología Salvando vidas.
Experiencias del pasado han mostrado los momentos críticos que vive la población, luego de enfrentar un sismo o un huracán, tal como sucedió en México en 1985, cuando luego de registrarse un fuerte terremoto, las comunicaciones, incluso estaciones de radio y las dos televisoras del país, permanecieron por varias horas fuera de servicio.
La suspensión del servicio de energía eléctrica y la caída de dos centrales telefónicas en el centro de la capital del país, dejó incomunicada a la población, los servicios 02 que enlazaban la comunicación con otros estados, así como la conexión internacional dejaron de funcionar, teniendo como única alternativa un reducido número de teléfonos satelitales que había en la capital del país.
Esta historia y muchos otros desastres que ha generado la recurrente temporada de huracanes, han mostrado la conveniencia de utilizar la tecnología, no solo para comunicarse o emitir alertas que ayuden a prevenir a la población, sino también desempeñar un papel fundamental en las labores de búsqueda y rescate de sobrevivientes.
Los alcances obtenidos en las comunicaciones hoy permiten a la población tener diferentes opciones en tiempo real, que traspasan las fronteras del país y que les permite transmitir videos, imágenes o testimonios desde las zonas afectadas por un desastre, todo a través de un potente y diminuto dispositivo con capacidad para conectarse a redes 5G.
Frente a la nueva era de conectividad e interconectividad, diferentes empresas en diversos países realizan pruebas para utilizar redes de quinta generación para la transmisión de alertas sísmicas en forma más rápida, con menor latencia y mayor confiabilidad, pero sobre todo a un costo más bajo frente a sistemas tradicionales.
“El empleo de drones y robots de rescate con gran capacidad de respuesta, que fungirán como mensajeros y apoyo para bomberos y rescatistas, con la finalidad de arriesgar el menor número de vidas, son otros de los usos donde se prueba la eficiencia de las nuevas tecnologías, destaca en su análisis AT&T México
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“5G no solo es cuestión de velocidad, sino de la forma en que impacta la vida de las personas”, pero para poder consolidar estos impactos positivos de la tecnología es imprescindible, además del despliegue de redes 5G, un ecosistema en el cual participen personas interesadas en especializarse en estos ámbitos y en fortalecer la innovación tecnológica con una visión de impacto social.
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