Con una indiscutible presencia en los procesos más básicos del ser humano, la Inteligencia Artificial (IA) se perfila como la tecnología con mayor impacto en la industria en 2022, año que se pronostica como decisivo para una adopción más amplia, de acuerdo con Jim Chappell, director global de IA y análisis avanzado de Aveva.
“A medida que alcanza la mayoría de edad, las organizaciones seguirán gastando en IA para optimizar sus operaciones, reducir costos, aumentar la eficiencia y fomentar la resiliencia de la cadena de valor”, añadió en un artículo.
De acuerdo con Gartner, refirió el especialista, este año se estiman ingresos globales por software de IA del orden de 62 mil 500 millones de dólares, lo que representa un aumento de 21.3 por ciento respecto al 2021.
Aunque la IA apenas cruza «su infancia», a medida que progrese, tendrá un impacto cada vez mayor en todas las industrias, incluso más que cualquier otra tecnología que hasta ahora se haya registrado en la historia del mundo.
A decir del especialista, el uso omnipresente de esta tecnología hará que los humanos deleguen cantidades cada vez mayores de trabajo a las máquinas, razón por la cual las empresas deberán evaluar debidamente los datos que recopilan, además de ser imprescindible la eliminación de sesgos y datos inadecuados, todo ello esencial para que las soluciones de IA sean confiables y aceptadas.
“En consecuencia, las empresas comenzarán a adoptar soluciones de IA responsables basadas en principios como la equidad y la transparencia, lo que dará como resultado el uso de conjuntos de datos integrales e inclusivos y una mejor gobernanza corporativa”.
Otra de las predicciones de Aveva es que los sistemas de IA que siguen transformando la capacidad humana, en los próximos años observarán una sinergia con el usuario, a medida que el mundo adopte los conceptos detrás de la industria 5.0, es decir, que habrá una colaboración entre máquinas y humanos para mejorar la productividad.
Y es que ahora las computadoras desempeñan un papel cada vez más importante al hacer el trabajo pesado y realizar análisis detallados para sus socios humanos.
“En el proceso, los sistemas de IA harán que los humanos sean mejores en lo que hacen. Las tareas repetitivas ya se han automatizado. El siguiente paso es reducir los errores con mejores parámetros en la toma de decisiones y mayor eficiencia”.
Así, al otorgar a los humanos una guía sofisticada y procesable, esta tecnología ampliará el alcance de nuestros trabajos y nos permitirá hacer más cosas más rápido.
Finalmente, Chappell consideró que a través de una combinación de IA y simulación basada en la física, por ejemplo, vemos análisis de vanguardia en el trabajo en la optimización predictiva de activos, donde se pueden pronosticar fallas probables junto con la provisión de un conjunto optimizado de acciones para mitigar pérdidas.
“De este modo, se puede eliminar el tiempo de inactividad de las máquinas y las pérdidas de producción, evolucionando con el tiempo hacia máquinas autónomas de auto reparación, lo que podría ahorrar cientos de millones de dólares en el camino para las grandes empresas industriales”, expuso.
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