Mientras el Foro Económico Mundial anticipa la desaparición de alrededor de 2 millones de empleos en los próximos años debido al avance tecnológico, la plataforma de profesionales LinkedIn advierte que en los últimos ocho años los requisitos para ocupar puestos laborales han cambiado hasta 36 por ciento por las nuevas habilidades digitales requeridas.
Este escenario se reafirma con la encuesta levantada recientemente por Noventiq en América Latina, en la cual se anticipa que la mayor presencia de tecnologías como la Inteligencia Artificial Generativa (IA), en los próximos 5 años provocará cambios profundos en actividades como ventas y marketing, desarrollo de productos, así como atención y experiencia del cliente.
Sin embargo, en medio de este panorama que a veces pareciera confuso, es necesario distinguir entre mitos y realidades y tener en cuenta que si bien muchos empleos se tienen que ajustar a nuevos contextos, eso no quiere decir necesariamente que los trabajos desaparezcan. Es posible que en el futuro, se requieran más personas con “habilidades blandas”, es decir, aquellas que los hace más humanos.
Arturo Sánchez, director Comercial de Noventiq México, (empresa especializada en transformación digital y ciberseguridad) señaló en entrevista con ConsumoTIC, que si bien el uso de IA ya venía desde hace varios años en experimentación de compañías especializadas, la reciente aparición de ChatGPT abrió el debate, de si esta tecnología dejará a millones de personas desempleadas.
En ese sentido, convocó a distinguir la realidad de la ficción:
“¿Qué es real?, Que la gente empieza a usar esa herramienta hasta hace poco reservada a un grupo de especialistas. ¿Qué es ficción? El miedo que se genera entre la gente por la incertidumbre” y por ello, anticipó que lo más requerido en el futuro serán las habilidades que nos hacen propiamente humanos, como el liderazgo, la empatía y la resolución de problemas entre personas, mientras que los “conocimientos técnicos puros”, como saber normas, regulación, hacer facturas u otras actividades manuales repetitivas, tenderán a ser sustituidas por la IA y otras tecnologías.
De hecho, el Informe “Futuro del Empleo 2023” dado a conocer por el Foro Económico Mundial recientemente, señala que en una encuesta levantada entre 803 líderes de las compañías más destacadas del mundo que emplean a 11 millones de personas en 45 economías de distintas regiones, “los empresarios prevén la creación de 69 millones de nuevos puestos de trabajo y la supresión de 83 millones, lo que supone una disminución neta de 14 millones de empleos, es decir, 2.0 por ciento del empleo actual”.
Y mientras 75 por ciento de estos empresarios globales anticipó que usará IA en su negocio en el futuro cercano o a mediano plazo, el estudio levantado por Noventiq entre 140 directores y altos ejecutivos de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, México y Perú, advierte que 62.8 por ciento de este universo ha utilizado IA Generativa profesionalmente para tareas como la creación de presentaciones o contenido de video, mientras que 76.7 por ciento, cree que esta tecnología redefinirá la forma de vida y de trabajo de los latinoamericanos en un lapso de tres años.
Arturo Sánchez advirtió que esto no significa que la gente va a perder automáticamente su trabajo, aunque labores repetitivas, de poca exigencia analítica o que generan escaso valor, sí tenderán a desaparecer justamente desplazadas por estas soluciones, pero de momento, lo más relevante es el hecho de que su uso aún no está regulado y ya hay quienes lo usan profesionalmente.
Tan es así, que según el estudio de Noventiq, el 83.6 por ciento de los latinoamericanos cree que la IA Generativa jugará un papel esencial en el futuro, mientras 41.1 por ciento de las organizaciones utilizan actualmente o tienen la intención de utilizar esta tecnología para un compromiso social más amplio.
Aún así, el tema tiene matices, pues el propio estudio sobre el futuro del empleo del Foro Económico Mundial indica que “aunque la revolución digital es un catalizador para algunas de las ocupaciones de más rápido crecimiento, se espera que muchas funciones no tecnológicas estén entre los mayores aumentos en el número total de puestos de trabajo creados”.
De tal manera que en los próximos cuatro años, se espera que actividades como conducir camiones pesados y autobuses; dar clases en el ámbito universitario y reparar maquinaria, generarán cada una 2 millones de empleos, “lo que supone una de las tasas de crecimiento absoluto más rápidas de todas las ocupaciones”.
En palabras del experto, el debate no debe ceñirse a una visión de “blanco y negro”, sino centrarse en darle a los empleos el valor humano y cómo nos profesionalizamos y hacemos un entorno más competitivo, donde sin duda se debe de luchar de la mano entre el gobierno y la iniciativa privada para reducir las brechas de conectividad, analfabetismo digital, brechas de género y otras, porque de no hacerlo, se segregaría mucho más a varios grupos poblacionales y “no podemos darnos ese lujo”.
C$T-GM