Tarifa y tiempo de envío, determinantes para el usuario.
En México, el comercio electrónico es un mercado de más de 17 mil millones de dólares; sin embargo, la venta de artículos por parte de personas físicas o Pequeñas y Medianas Empresas (Pymes) a través de su propio sitio o redes sociales, cobra cada vez más fuerza y tiene entre sus principales desafíos la distribución y entrega de sus productos.
En opinión de Ilan Epelbaum, director general de Mail Boxes Etc. México (MBE), el «boom» del e-commerce lo han sabido aprovechar muy bien los emprendedores dando paso al «e-commerce artesanal», quienes en determinado momento de su operación se enfrentan a diversos retos relacionados con la logística.
“El verdadero reto del comercio artesanal está en la distribución y entrega de sus productos. Vender unas cuantas piezas no es complicado si el mismo vendedor imprime su guía y lleva el paquete, pero cuando se dan los crecimientos exponenciales que estamos viendo, se topan con que no cuentan con un plan de logística que les permita entregar muchos productos en tiempo y forma”.
En la actualidad, 80 por ciento de las PyMEs venden sus productos a través del comercio electrónico pero al momento de crecer, el tema logístico se convierte en un problema. Ejemplo de ello es Querida Agenda y Gugú Ámbar, dos exitosas micro empresas mexicanas que en sus inicios afrontaron el reto de distribución.
Para Marisa Chambón y Pamela Romo, fundadoras de “Querida Agenda”, la inexperiencia las hizo enfrentarse a varios problemas, entre ellos, cómo lograr exitosamente su primer envío de mil 500 agendas. Al principio fijaron un costo de envío muy bajo lo que les ocasionó pérdidas, pues ellas tenían que cubrir el resto del envío.
Cuando decidieron emprender no pensaron en que vender agendas requiere una distribución precisa en cuestión de tiempos, sobre todo porque la mayoría de las personas las adquieren antes de fin de año. Así, en diciembre de 2017, se encontraron con que debían realizar el envío de 700 agendas de manera urgente, por lo que optaron por hacerlo ellas mismas: las empacaron, las llevaron a la mensajería y generaron las guías de entrega para darle seguimiento a cada envío.
“Fue un caos, la mayoría de las veces desconocíamos el estatus de entrega, los paquetes se perdían en el camino o no llegaban a su destino. Nuestra salvación fue encontrar a Mail Boxes Etc, que nos trajo una solución para el tema de envíos. Hoy, es nuestro socio estratégico, tenemos un mejor control y hasta generamos ahorros en el tema logístico”, explicó Marisa Chambón.
Otro ejemplo de eCommerce artesanal exitoso, es Gugú Ámbar, que en la actualidad cuenta con más de 83 distribuidoras a nivel nacional, y vende sus productos también en Europa y Latinoamérica. Para Cecilia Gayol, la fundadora, el problema no fue crecer, sino hacerse cargo de la distribución, pues todos los pedidos salen de la Ciudad de México hacia cualquier parte del mundo.
“Hoy en día, el empacado, etiquetado, logística y distribución de los collares están a cargo de MBE, y por medio de su plataforma digital, puedo dar seguimiento en un solo lugar de todos los pedidos de los clientes para saber en tiempo real dónde se encuentran. Esto me ha permitido concentrarme en mi negocio y extenderme mi línea de productos a joyería para adulto”, afirmó Gayol.
En opinión de Ilan Epelbaum, entre los factores importantes para que los usuarios concluyan una compra se encuentra que el comercio les garantice una tarifa de envío accesible y clara; además de que el tiempo de entrega sea menor a cinco días.
“Para Querida Agenda y Gugú Ámbar, el éxito de su negocio es gracias a que logran cumplir con su promesa de entrega. Antes tardaban entre 7 y 10 días para que llegara el producto a sus clientes, hoy, se redujo a tres días gracias a MBE».
C$T-GM