Una plataforma digital mediante la que se muestran videos interactivos es utilizada como una herramienta terapéutica para mejorar el bienestar y calidad de vida de las personas con Trastornos del Espectro Autista (TEA), afecciones relacionadas con el desarrollo del cerebro con las que vive el 1.0 por ciento de la población mundial.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que los TEA se caracterizan por algún grado de dificultad en la interacción social y la comunicación, aunque hay casos en los que también presentan patrones atípicos de actividad y comportamiento, como dificultad para pasar de una actividad a otra, gran atención a los detalles y reacciones poco habituales a las sensaciones.
Para el psicólogo clínico Álex Escolá, profesor colaborador de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), las personas con autismo «viven en un mundo que funciona mayoritariamente con el sistema operativo Windows, pero ellos usan macOS, lo que les genera dificultades de compatibilidad continuamente».
Por ello, para apoyar la adaptación funcional de este grupo de personas “en el mundo de Windows”, Escolá y un equipo de psicólogos del Instituto de Diagnóstico y Atención Psiquiátrica y Psicológica de Barcelona crearon una plataforma web de videos interactivos llamada AutisMIND Videos, que lleva más de 35 mil descargas.
Se trata de una herramienta para estimular la comunicación y la cognición social de los adolescentes y adultos, a través del ejercicio de la toma de decisiones ante situaciones concretas, ya que durante la reproducción de los videos eligen cómo sigue la historia, cómo se resuelve un problema o qué desenlace tiene una situación.
Es un proyecto en el que participan adolescentes y jóvenes con autismo que dan asesorías para la realización de los guiones, lo que para Escolá es una guía respecto a su forma de ver el mundo, desde su propia experiencia, puesto que la neurodiversidad aporta valor y beneficia a todo el mundo.
AutisMIND Videos, que tiene como antecedente AutisMIND, una aplicación móvil lanzada en 2017 por Escolá y dirigida a un público infantil, es uno de los ocho proyectos finalistas de la edición 2022 del programa de emprendimiento SpinUOC, impulsado por Hubbik. La iniciativa de Álex Escolá ganó el premio del público en el acto final del programa, celebrado en junio en la Antigua Fábrica Estrella Damm de Barcelona.
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