Como resultado de las mesas de trabajo realizadas en la Asociación Mexicana de Inteligencia Artificial (ANIA) en las que participaron órganos regulatorios, academia, expertos de distintas áreas y la Academia Mexicana de Ciberseguridad y Derechos Digitales (AMCID), se está preparando un documento de políticas públicas que se presentará a las candidatas y el candidato presidenciales, para “que este tema disruptivo y estratégico forme parte del Plan Nacional de Desarrollo”.
Así lo adelantó la senadora Alejandra Lagunes, integrante de la ANIA, al participar en una mesa de análisis realizada al término de la presentación del “Panorama de la inteligencia artificial en México: hacia una estrategia nacional y la relevancia del sandbox regulatorio”, donde indicó que “estamos a días de tenerlo listo” para entregarlo a los equipos de campaña y asegurarse que este tema disruptivo forme parte de las políticas públicas del gobierno que se ha de elegir el próximo 2 de junio.
Además, anticipó que a través de sendos grupos de trabajo en materia de ciberseguridad y de sandbox regulatorio, se están preparando dos iniciativas: una de carácter colaborativo de Ley de Ciberseguridad, en la que el Senado de la República ha trabajado en conjunto con el INAI, y otra para que la figura del sandbox regulatorio se eleve a rango de ley y que esta figura se utilice para la creación de legislaciones en cualquier tecnología emergente, como ya está ocurriendo con el caso de la IA.
A pesar del poco tiempo que queda en la actual legislatura, confió en que por lo menos las iniciativas queden concluidas y presentadas, para que el próximo Congreso de la Unión, pueda eventualmente aprobarlas.
Recordó que uno de los temas presentes en las mesas de trabajo, fue la idea generalizada de fortalecer a los órganos reguladores autónomos, para que estos colaboren de manera institucional para lograr la corresponsabilidad y la colaboración, en el caso de la regulación legal de las tecnologías disruptivas que ha llegado a revolucionar el mundo actual, tanto como lo hizo en su momento el propio internet.
Al respecto, el senador Gustavo Madero señaló que a pesar de la buena coordinación que en esta materia se ha llevado a cabo entre órganos regulatorios como el IFT, el INAI y la Cofece, es necesario ajustar la legislación que los rige, porque ésta “fue creada para un mundo que ya no existe”.
Es bueno que los órganos autónomos se comuniquen entre ellos, “porque tampoco fueron diseñados para comunicarse entre sí”, pero además, se tienen que comunicar también con otros órganos que no necesariamente son regulatorios, pero que pueden aportar visiones útiles para el debate.
Y aunque señaló que hacia el final de esta legislatura “la estafeta está en buenas manos, porque hay compromiso de muchos actores”, se atraviesa por un momento similar al que se vivió hace algunos años, cuando se interrumpió el trabajo que se venía haciendo en esta materia y por ello, adelantó que propondrá crear un órgano técnico en el Senado, para que este trabajo continúe a pesar del cambio de legislaturas y sin importar los vaivenes políticos.
En el mismo encuentro, el comisionado presidente del INAI, Adrían Alcalá, adelantó que la institución a su cargo ha presentado una Política Nacional de Datos Abiertos que ya está publicada y es importante para guiar el desarrollo de la Inteligencia Artificial, privilegiando al mismo tiempo la protección de los datos personales y el esquema de datos abiertos.
En su oportunidad, Javier Juárez Mojica, comisionado presidente del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), aseguró que las mesas de trabajo de la ANIA y el ejercicio de sandbox regulatorio conducido por la AMCID con el apoyo de la Embajada del Reino de la Gran Bretaña en México, han sido un ejemplo de colaboración entre la sociedad civil, los distintos actores económicos, la academia y el Poder Legislativo.
Es importante definir la estrategia con la que se va a impulsar a la IA, para que ayude al desarrollo de México, sin que se use con fines dañinos, como sin duda puede ocurrir. La idea de una Agencia de Desarrollo Digital, Innovación y Tecnologías Emergentes para regularla es ambiciosa, y tal vez pueda llevar a un futuro deseable, pero no posible, por lo cual es mejor tener una perspectiva que conduzca a un escenario que sí sea posible y al mismo tiempo positivo.
Sobre los sandbox regulatorios dijo que son una herramienta útil para crear regulación sin frenar la innovación y dar un balance entre las preocupaciones por los riesgos que implica la IA y su desarrollo, aunque aclaró que también hace falta infraestructura de 5G e insistió en que es necesario disminuir el costo del espectro radioeléctrico, que es un verdadero lastre para el desarrollo.
Finalmente, Martin Johnson, consejero para el desarrollo internacional de la Embajada del Reino Unido de la Gran Bretaña en México –instancia diplomática que propició la realización de los sandbox regulatorios en nuestro país entre enero y febrero de este año-, dijo que la IA representa tanto un riesgo como una oportunidad y dada su dimensión, se hace necesaria la colaboración internacional, la cual ya no es un lujo, sino una necesidad.
Explicó que en su país, se tienen identificadas 3 mil 170 empresas que desarrollan IA, las cuales en los últimos años han generado ingresos por 10 mil 600 millones de libras; han generado 50 mil empleos y aportado 3 mil 700 millones de libras de valor añadido a la economía nacional y aún se espera que esta cifra mejore radicalmente en el corto plazo.
“Nuestro Libro Blanco de regulación de la IA incluye desarrollar regulaciones claras y efectivas para que la tecnología se use de forma segura, justa y transparente sin sofocar la innovación”.
C$T-GM