A menos de una semana de las elecciones federales en México, aún es difícil hablar de lo que el futuro gobierno hará en materia de telecomunicaciones, si bien «la industria está lista para hacerle frente a los desafíos del próximo sexenio».
Así lo señaló Lucas Gallitto, director de GSMA para América Latina, quien en entrevista con ConsumoTIC indicó que el mayor de estos retos es claramente el alto costo del espectro, que constituye una barrera para las inversiones.
Durante la entrevista efectuada en el contexto del evento M360 de GSMA, el especialista recordó que recientemente, la GSMA emitió un documento de recomendaciones para México donde aborda temas de simplificación normativa, infraestructura digital y conectividad significativa, además del costo del espectro.
De estas recomendaciones, dijo, «lo más importante que tenemos aquí es el alto precio del espectro», donde hay una política recaudatoria ineficiente, aunque la industria está lista para enfrentar éste y otros desafíos que se presenten en el sexenio que iniciará el próximo octubre de este año.
Recordó que en México se da una paradoja que no ocurre en ningún país de América Latina y probablemente en ninguna parte del mundo, a partir de la política recaudatoria con la que se ve el espectro.
Esta política recaudatoria mantiene a este recurso entre los más caros del mundo y ha llevado a dos escenarios: primero, en el pasado había más espectro disponible que en el presente y, segundo, «lo que parece contraintuitivo, es que hasta como política de recaudación de dinero, la política actual es ineficiente».
Esto es: «en 2024, el gobierno va a recaudar menos por la explotación de este recurso que en el 2023» e insistió en que tal vez México, sea el único país donde esto ocurre «y donde hemos dicho que se forma la tormenta perfecta donde todos pierden».
Pierde el gobierno porque recauda menos; pierden los usuarios porque significa una disminución en la calidad del servicio (es una autopista a la que le hemos quitado carriles) y pierden las compañías porque ven limitada su capacidad de inversión.
Respecto a la probable desaparición del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) que podría ocurrir durante el gobierno de Claudia Sheinbaum dado que se ha manifestado coincidencia con las iniciativas de reforma presentadas en ese sentido, Lucas Gallitto dijo que hasta ahora no se ha visto un plan específico de cómo podría ocurrir y por lo tanto es muy pronto para opinar; «somos muy respetuosos de las decisiones que el gobierno mexicano vaya a tomar.»
Sin embargo, recordó que la propia existencia del IFT está incluida en tratados internacionales y «sin ser experto en el entramado legal del T-MEC y su impacto en la materialización de los cambios que se proponen, hay cosas que tomar en cuenta y no son menores».
Hasta ahora, dijo, no ha tenido oportunidad de dialogar con representantes del futuro gobierno de México, aunque en este encuentro, el M360 de la GSMA, saludó brevemente a José Merino, quien se perfila como probable responsable de la Estrategia Digital del próximo gobierno.
En todo caso, más allá de ver los planes que se pudieran poner en marcha para el próximo sexenio, sí es un hecho que a lo largo de los 10 años que lleva funcionando, el IFT ha dado certidumbre al sector de las telecomunicaciones en México y ha sido un regulador de vanguardia en América Latina, pero insistió, «es muy prematuro» hablar de cómo podría transformarse la institucionalidad en torno a la regulación del sector de las telecomunicaciones en México.
Respecto a la continuidad de Rogelio Ramírez de la O, como secretario de Hacienda hacia el próximo sexenio y la probable insistencia en la política recaudatoria en torno al espectro radioeléctrico, señaló que sería injusto reducir su actuación a ese solo aspecto.
Y es que México tiene una economía estable, en crecimiento, con un tipo de cambio también estable y es una de las principales economías del mundo y de América Latina lo cual, entre otras razones, se explica por la disciplina fiscal que se ha dado en los últimos años.
Empero, una de las recomendaciones que ha hecho la GSMA en materia fiscal, es la eliminación del Impuesto Especial sobre Productos y Servicios (IEPS) para el servicio de telecomunicaciones, pues se trata de un gravamen que tiene impacto en la asequibilidad de los servicios.
«Hicimos un estudio con Deloitte y encontramos que eliminando el IEPS en telecomunicaciones, México tendría la posibilidad de sumar 1.5 millones de conexiones al ecosistema digital y elevar el aporte del PIB en 4 mil 500 millones de dólares».
C$T-GM