Aunque es muy difícil que a México llegue una empresa dispuesta a invertir 50 mil millones de dólares para establecer una planta de semiconductores capaz de fabricar piezas de dos nanómetros y competir así en el mercado global más exigente, sí hay posibilidades de que el país se incruste en partes de la cadena de suministro de esta industria global.
Durante el panel titulado “Semiconductores e Inteligencia Artificial en el tablero geopolítico” del México Digital Summit, especialistas en el tema coincidieron en que a pesar de los retos técnicos y de inversión, nuestro país sí tiene posibilidades de insertarse con éxito en el mercado global, en tanto se concretan seguridad jurídica, recursos humanos bien capacitados e inversiones que pueden ser públicas, privadas o en combinación.
Héctor Marín director de relaciones con gobierno de Qualcomm México, fue claro en señalar que difícilmente vendrá una empresa a generar las grandes inversiones para establecer las plantas capaces de construir los semiconductores de dos nanómetros que hoy día son los más importantes en el mercado global. “Creemos que eso no va a suceder”, aclaró.
En el corto y mediano plazo, “no vamos a tener la planta de semiconductores de esas capacidades como las hay en Asia”, pero sí en la producción de semiconductores de 200 a 500 nanómetros que es otro mercado, pero donde sí existen posibilidades para México. Lo importante es definir dónde quiere jugar el país en este mercado global.
A su vez, Hugo Simg, director de ventas corporativas de Mediatek para América Latina aseguró que el monto de este tipo de inversiones se calcula en miles de millones de dólares, implica que hace falta una gran certeza jurídica para empezar y sobre todo, definir “dónde queremos jugar” como país en la cadena, donde no todo es producir semiconductores de dos nanómetros que es como dividir un átomo.
Sin embargo, sí hay otras partes del proceso donde es viable insertarse en la cadena, como en el desarrollo de materiales de fabricación, en el empaquetamiento (que tiene su ciencia) y en el tema de pruebas “para empezar a caminar en los mercados accesibles, no sólo en el de Estados Unidos, sino en el doméstico”.
La clave está en la coordinación entre el gobierno, la academia y la industria, en un ámbito de seguridad jurídica, porque “este no es un proyecto para un sexenio, tenemos que empezar a caminar y dar los primeros pasos”, aseguró.
También es importante tener en cuenta que si se decide fabricar semiconductores aquí, se tiene que estar conscientes de que para ser competitivo, se tienen que fabricar millones de piezas, porque de no ser así, no se pueden amortizar las inversiones.
Desde el punto de vista del gobierno, Diego Flores, titular de Industria Digital y Electrónica de la Secretaría de Economía, coincidió en que México tiene opciones reales para insertarse en las cadenas de suministro de esta industria global.
“La visión de México es ubicarse en Norteamérica; por ello, hemos puesto sobre la mesa que en el T-MEC existe un capítulo de semiconductores para el fortalecimiento de la región”, con independencia de la política interna que ha diseñado el gobierno federal para este tema.
Detalló que la estrategia se basa en tres ejes: el Plan Maestro de Semiconductores que se creó en conjunto con la industria; el Plan México que desarrolla más a profundidad los temas y el tercero es el Plan Cutzari, que está trabajando para participar directamente en esta industria.
Aseguró que hay oportunidades de negocio donde nuestro país puede ser competitivo en temas como traer una planta de chips legado, pero también “tenemos que dar buenas señales”, si bien para los siguientes pasos en Inteligencia Artificial tiene que haber habilitadores”.
Recordó que esta industria no se detiene y por eso “tenemos que ubicarnos y ver dónde estamos y apostar al desarrollo de talento”, como se está haciendo en coordinación con la SEP, donde se está enfocando la formación de talento en cuatro líneas: electromovilidad, semiconductores, Inteligencia Artificial y Ciberseguridad.
C$T-GM
