Se enviaría una señal negativa a Cadena Tres y a interesados en próxima licitación
Un eventual cambio de fecha para el “apagón analógico” de la televisión abierta a nivel nacional implicaría graves daños a proyectos como la Red Compartida, la operación de la nueva cadena e inhibiría el interés de inversionistas extranjeros, aseguró el integrante del Pleno del Ifetel, Adolfo Cuevas.
Entrevistado en el marco del lanzamiento de la campaña #PuedeEsperar, el funcionario dijo que “cualquier prórroga supone el atraso en los programas de despeje de bandas para su uso en nuevas tecnologías… y habría una visión desde el exterior de mucha preocupación sobre ese tipo de decisiones”.
Aplazar la fecha para el cese definitivo de las transmisiones de señales analógicas de televisión programada para el próximo 31 de diciembre, como lo proponen algunos legisladores como Javier Lozano, el proyecto de Red Compartida sufriría un efecto adverso.
El “apagón analógico” permitirá liberar un excedente del espectro de la banda de 700 MHz (dividendo digital) y asignarlo a servicios de banda ancha móvil a través del despliegue del proyecto de Red Compartida.
“La Red Compartida precisa poner a disposición del socio que entre con el Estado la banda entera de 700 Mhz si hay una señal de que no se va a despejar completamente este año, sino 12 meses más tarde, eso necesariamente afecta”, subrayó el integrante del Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel).
El comisionado Cuevas advirtió también que una prórroga de esta magnitud enviaría una señal negativa no sólo a Cadena Tres, la empresa que ganó la licitación para el despliegue de una nueva opción televisiva en el país, sino también a los interesados en la próxima licitación de frecuencias.
“Veo con preocupación la señal que se enviaría a los que ya adquirieron la tercera cadena de televisión porque están en la expectativa de utilizar solo señales digitales y de que hubiera un acompañamiento del Estado para lograr esto, además que afectaría la licitación ya proyectada de canales digitales para 2016”.
En opinión del funcionario, dar marcha atrás en el proceso de transición a la televisión digital generaría un desperdicio de los recursos públicos que ya se destinaron a la compra y reparto de televisores en las ciudades que ya apagaron las señales analógicas y las que están por hacerlo en próximas semanas.
Cuevas subrayó que si bien es respetuoso de las decisiones del Poder Legislativo “exhorto como ciudadano a que el Congreso piense en estos temas y vea realmente que de lo que se trata es avanzar como país a la economía digital sin generar problemáticas por señales contradictorias a los inversionistas”.
C$C-GM