Separación Funcional de Telmex se mantiene firme.
La relación entre el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) y el nuevo gobierno ha sido de absoluto «respeto y comunicación abierta» para trabajar sobre la amplia agenda de trabajo que se tiene en materia de telecomunicaciones y radiodifusión, aseguró Gabriel Contreras Saldívar, en relación a la supuesta animadversión que la presente administración tiene contra los organismos autónomos.
«Hostilidad ninguna, lo que hay es una muy buena comunicación con la titular de la Subsecretaría TIC, Salma Jalife, quien estará a cargo de los temas que guardamos relación; no hemos recibido ninguna señal hostil en lo absoluto, por el contrario han sido muestras de respeto», sostuvo el Presidente Comisionado del órgano regulador.
Detalló que desde el proceso de transición se logró tener una buena relación y comunicación tanto con Abel Hibert, en su momento asesor del actual presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, como con la actual titular de la Subsecretaría TIC, Salma Jalife, quienes han manifestado desde un inicio voluntad para trabajar con la agenda relacionada con las Tecnologías de la Información y la Comunicación.
Cuestionado sobre los recientes planteamientos del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana (STRM) que piden la intervención del gobierno de Andrés Manuel López Obrador para revertir el proceso de Separación Funcional de Telmex, aseguró que son improcedentes y sólo reflejan «desconocimiento», pues es facultad constitucional del IFT ejercer las medidas que juzgue convenientes para garantizar competencia en la industria.
«Constitucionalmente corresponde al Instituto Federal de Telecomunicaciones emitir la regulación asimétrica al Agente Económico Preponderante, eso está ordenado expresamente en la Constitución… conforme a la ley ya se resolvió la separación y el plan de implementación para llevarlo a cabo, y está llevando su curso pues este año se resolvió los estatutos constitutivos de las empresas que habrán de prevalecer con motivo de la separación».
Es una resolución que está firme; la separación va a pasar sustentada en lo que ordena la Constitución pues toca al órgano regulador resolver la forma en que se implementará y no a ninguna otra autoridad.
El pasado 5 y 16 de diciembre el STRM planteó que Telmex se enfrenta a «reguladores que buscan frenar el desarrollo de la empresa» pero confió en que el nuevo gobierno intervenga y frene el proceso de Separación Funcional que está planeado llevarse a cabo en 2019 y que afectará a poco más de 14 mil trabajadores, por lo que mantienen vigente su emplazamiento a huelga para el 16 de enero del próximo año.
«Afortunadamente cuando eso suceda ya estará otro gobierno, y eso me hace sentir optimista… no tengo duda de que el nuevo gobierno es más sensible a este tipo de problemas y tendrá voluntad para ayudarnos a encontrar otro tipo de solución», aseguró Francisco Hernández, líder de los trabajadores telefonistas.
Reunido con los medios de comunicación, el titular del IFT precisó que hasta el momento Telmex no ha presentado solicitud alguna para modificar los términos originales de su título de concesión, aunque admitió que una empresa que pertenece al AEP ha pedido autorización para ofrecer servicios de televisión restringida, caso que al encontrarse en curso de revisión, impide legalmente ofrecer mayores detalles.
Destacó que la autonomía del órgano regulador se estableció desde la Constitución para garantizar que las resoluciones de esta instancia se apegaran estrictamente a cuestiones de orden técnico y mantenerse autónoma de cualquier grupo de interés económico o político.
«Está demostrado que la autonomía ha sido para que el instituto asuma decisiones técnicas y no se caiga en decisiones políticas o de intereses económicos, para tener resoluciones que favorezcan al Estado y al desarrollo del sector de las telecomunicaciones y la radiodifusión, esto es algo que está ampliamente documentado en la experiencia que precedió a la Constitución del IFT».
Aclaró que cuando se habla de asumir las mejores decisiones para el sector, se hace referencia también al beneficio que reciben los usuarios de los servicios TIC y las audiencias, «de eso hablamos, cuando hablamos de autonomía», por ello fue imprescindible en 2013, crear un regulador con plena autonomía, porque en el pasado no la tuvo y con ello se impidió que se alcanzaran beneficios que hoy tienen los consumidores y la población en general.
Sin embargo, habló de la necesidad de evitar caer en la confusión entre autonomía e independencia, pues los órganos autónomos son entidades que forman parte del Estado Mexicano y «todos están obligados a coadyuvar a los fines que tiene el Estado mexicano».
Por ello el IFT ha demostrado que la autonomía ha sido útil para asumir decisiones y regulaciones de carácter exclusivamente técnico, «no importa lo políticamente costosas que sean», y sobre todo que muestren utilidad y beneficio tangible para la competencia de la industria en general y que aporten beneficios tangibles para los usuarios y las audiencias en México.
C$T-EVP