Sanciones ejemplares para inhibir malas prácticas
Al margen del impago en que incurrió Tecnoradio, la Licitación IFT-4 dista mucho de ser un fracaso, continúa siendo histórica por ser la primera de esta índole que se realiza en México, y porque cumplió con los objetivos trazados como fue ampliar el número actores en la industria de la radio y dar entrada a nuevos participantes.
Edgar Olvera Jiménez, Subsecretario de Comunicaciones de la SCT reconoció que el tema de Tecnoradio y la apuesta fallida que hizo por 37 partidas distan de ser un éxito, pero como el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) lo ha comunicado con toda oportunidad, se está verificando si existen condiciones para adjudicar a los segundos lugares esas frecuencias.
Adicionalmente será el mismo órgano regulador el que determine si existen causales que amerite el ejercicio de acciones civiles o penales en contra de Tecnoradio, “por ello no vería como un fracaso esta licitación, con todo y que hay mucho por mejorar y aprender” de estos procesos, sostuvo luego de su participación en el Latin American Satellite Communication & Broadcasting Summit (LATSAT).
Contrario a lo publicado en algunos medios, la SCT no cuenta con una gran área de investigación que pueda incluso, saber el perfil de los comisionados del IFT, o conocer la identidad de los rasgos y los vínculos familiares de las personas.
La SCT emitió una opinión pero fue técnica, en relación a la estructura accionaria de los participantes sin entrar en detalles de sus vínculos familiares, porque no es su facultad, eso lo hace el IFT, la dependencia tiene que respetar los límites que no le dio la ley.
Argumentó que el hecho de que el empresario Alí Bañuelos haya participado en la licitación para los televisores que se otorgaron a los hogares de bajos recursos durante la transición a la Televisión Digital Terrestre, no implicó que la SCT tuviera un expediente con los detalles de cómo opera en Diamon Electronics, así como en los negocios que realiza por separado.
No es la Secretaría (SCT) la espía de las licitaciones, ni de los concursantes, no tiene la facultad, ni la información, ni el bunker de información o de espionaje como según publicó un medio”.
Cuestionado sobre las previsiones que debe asumir el gobierno federal y el IFT para blindar futuras licitaciones de temas como los de Tecnoradio o de Radio Centro que por segunda ocasión participa en una licitación pública e incumple el pago de la contraprestación en al menos dos frecuencias, el funcionario habló de la complejidad de encontrar una fórmula.
Tecnoradio tendrá que enfrentar el pago de una penalización que son las garantías de seriedad sobre cada una de las frecuencias en las cuales haya apostado, y el segundo castigo serán las acciones que el instituto determine, en caso de que exista otra violación a las reglas establecidas en la licitación, por ello es importante darle el voto de confianza al IFT que va siguiendo su proceso y lo comunica”.
Hacia futuras licitaciones, indicó, se podrían incrementar las garantías de seriedad, cuidando que no sean tan pesadas que pudieran inhibir la participación en los procesos, así como cerrar pinzas en materia de competencia económica, e imponerse sanciones ejemplares.
C$T-EVP