Al cierre del año, esta tecnología generará ingresos superiores a mil mdd
Con más de 70 años a cuestas, la televisión tradicional enfrenta una férrea competencia proveniente de las plataformas de servicios Over-The-Top (OTT) que la llevará a explorar nuevas opciones como la Realidad Virtual (RV), puede permitirle crear una oferta atractiva para la audiencia que adopta nuevos hábitos de consumo.
“La televisión abierta es como una persona mayor, tiene muchos años encima pero también experiencia y una herencia importante, en ese sentido la Realidad Virtual sería una herramienta para atraer a ese público disperso como los Millenials o los más jóvenes”, señala Alejandro Sugich, CEO de Sula Films.
De acuerdo con Deloitte, 2016 será el primer año en el que la Realidad Virtual genere ingresos estimados en mil millones de dólares, de los cuales, aproximadamente 700 millones procederán de ventas de equipos y el resto por la comercialización de contenidos.
Los equipos de Realidad Virtual proporcionan una experiencia de inmersión visual (y en ocasiones auditiva) mediante un visualizador en forma de casco o gafas que muestra una imagen estéreo en Tercera Dimensión (3D), explica la consultora.
Los sensores del dispositivo detectan los movimientos del usuario y cambian la imagen para adaptarse a ellos. Por ejemplo, con la versión de RV del submarinismo, el usuario siente como si hubiera peces reales nadando hacia él.
Si mira hacia arriba, verá una imagen realista del cielo. Si dirige la vista hacia abajo, verá el fondo del mar. El sonido también se ajusta a los movimientos del usuario y contribuye a su sensación de estar en otra parte. En igualdad de circunstancias, cuanto mayor es la resolución de la pantalla y más rápido se actualiza, más convincente resulta la simulación
En opinión del director ejecutivo de la firma dedicada a producir y distribuir contenidos audiovisuales, estas características de la RV la convierten en una poderosa extensión de la televisión tradicional, no sólo para acercar a la audiencia con diversas propuestas, sino para abrir la puerta a nuevos modelos de negocio.
“En Sula Films tenemos un par de años con una plataforma de RV, le estamos apostando a los contenidos culturales y de historia; no sólo se está pensado para las televisoras públicas sino también para las comerciales”.
Sugich admitió que el financiamiento es una de las aristas más difíciles del plan de negocios de un proyecto de este tipo; sin embargo, la presencia de inversionistas privados e instancias gubernamentales podría apalancar su desarrollo.
“Es cierto que la audiencia está migrando a otras plataformas de contenidos, pero la televisión sigue ahí, es como un estadio que por momentos se queda solo pero el espacio sigue estando presente, lo que hay que ver es qué evento vamos a poner, y en ese sentido le apuesto a la cultura, al cine de arte y a la historia”.
De acuerdo con el estudio “Predicciones de Tecnología, Medios de Comunicación y Telecomunicaciones 2016” de Deloitte, una de las principales razones de la mínima incidencia que la RV ha tenido este año en la televisión y en el cine es que existen pocos contenidos de RV, fundamentalmente como consecuencia de la escasez de cámaras profesionales o incluso de aficionados capaces de grabar imágenes de RV.
“Existirán aplicaciones de RV, pero creemos que por lo general ofrecerán una imagen de una sala de estar virtualizada con un televisor virtual en el que podrán verse programas normales de televisión en dos dimensiones”.
Sin embargo, para Sugich el escenario se perfila positivo pues los principales jugadores en el mercado de la televisión abierta mexicana entienden cada vez más la importancia de adoptar estrategias transmedia, es decir, el despliegue de contenido a través de múltiples medios y plataformas de comunicación, y es hacia allá a donde están dirigiendo sus esfuerzos.
C$T-GM