De un total de 125.4 millones de usuarios de telefonía, sólo 12.8% decidió cambiar de proveedor de servicio
En 2008, México fue el primer país de América Latina en implementar la portabilidad numérica, una herramienta regulatoria que tiene el poder de “liberar” al usuario del aprisionamiento que representaba perder su número telefónico, si deseaba cambiar de compañía proveedora del servicio.
De acuerdo con la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), la percepción general entre 105 millones de suscriptores de telefonía móvil y 20.4 millones de fija en el mercado mexicano, es que este tipo de servicios son “malos y caros”.
Sin embargo, a seis años de su entrada en vigor, sólo 16 millones, es decir, 12.8 por ciento del total de usuarios de telefonía móvil y fija que hay en el país, han ejercido su derecho a cambiar de compañía como resultado de deficiencias en el servicio.
Algunos datos muestran que aunque la operadora de telefonía Telcel acumuló en 2013 la mayor cantidad de denuncias en el sector de las telecomunicaciones ante la Profeco, desde el inició de la portabilidad numérica, esta firma logró posicionarse como el gran ganador de usuarios.
En el acumulado, la empresa propiedad de Carlos Slim, Radio Móvil Dipsa, (Telcel) ganó de otras operadoras de telefonía, 8 millones 805 mil 606 suscriptores que decidieron cambiar de proveedor de servicio, sin embargo, perdió 4 millones 761 mil 803 usuarios, proceso que le dio una diferencia a favor de 4 millones 043 mil 803 clientes.
En el caso de Telefónica Movistar, cedió 5 millones 924 mil 972 usuarios a otros proveedores, pero recibió un total de 5 millones 297 mil 386, lo que representó una pérdida de 627 mil 586 clientes.
El caso Iusacell fue la recepción de 208 mil 045 y donó un millón 687 mil 089, lo que arrojó un saldo negativo de un millón 479 mil 044 clientes que dejó en manos de la competencia.
De acuerdo con un sondeo realizado por la Profeco, entre los motivos por los cuales los usuarios deciden portar su número hacia otro operador de telefonía fija o móvil, es recibir un servicio deficiente y costo de tarifas por minuto altas.
En la encuesta realizada los usuarios también externaron como una causa para migrar de operador, una velocidad de internet “lenta”, incluso por debajo de lo ofrecido al ser contratado, así como no recibir todo lo prometido y padecer un servicio de atención a cliente sumamente deficiente.
Para el director de la firma de consultoría The Competitive Intelligence Unit (CIU), Ernesto Piedras, entre las principales dificultades que ha enfrentado la política de portabilidad numérica en México, se encuentra la ausencia de una serie de medidas regulatorias que debieron ser implementadas desde hace tiempo, para promover la competencia en el sector.
En opinión del especialista, la regulación efectiva de las tarifas de interconexión, hubiera evitado que los operadores se beneficiaran de las tarifas on-net y off-net, es decir, cobrar más barato a los usuarios que realicen llamadas dentro de su propia red y elevar el precio para quienes decidan comunicarse a la red de la competencia.
“Podría considerarse la portabilidad numérica como un fracaso dado el bajo número de líneas portadas respecto a la base total de usuarios de telefonía, pero al mismo tiempo es una medida exitosa, pues ha generado un mayor empoderamiento de los consumidores, permitiéndoles ajustar decisiones del pasado a sus necesidades actuales”, finalizó.