El despliegue de redes móviles de nueva generación en México es ya una realidad en la que se insertan nuevos hitos en ámbitos como el de la industria 4.0, pues el país está echando a andar redes privadas para minas subterráneas y a cielo abierto.
Se trata, explicó Leunam Betin, Global Key Account Manager en Ericsson Latinoamérica Norte y el Caribe, de lo que serán las primeras redes móviles listas para 5G desplegadas en un entorno de producción minera subterránea en América Latina, lo que hace evidente las posibilidades de las redes privadas en la industria y la región.
“En Latinoamérica, Ericsson identifica una oportunidad muy interesante: en el pasado, los operadores de redes móviles celulares estaban muy enfocados en conectar personas, en el consumidor final; sin embargo, la tecnología 5G tiene un potencial en todo lo que es la industria y negocios”.
Las minas utilizarán las redes privadas para supervisar en tiempo real las máquinas mineras, los sensores y el sistema de energía en decenas de kilómetros de túneles mineros.
La red privada también les permitirá a las minas controlar a distancia la ventilación y localizar a los trabajadores en tiempo real a través del uso de cascos inteligentes, así como enviar mensajes de emergencia o comunicaciones de misión crítica push-to-talk y push-to-video.
Hacia 2027, y en un escenario en el que 66 por ciento del tráfico total de datos móviles en América Latina será transportado por redes 5G, las características de esta nueva generación móvil, como mayor velocidad, confiabilidad y menor latencia, serán un catalizador en el desarrollo de sectores clave como la minería, manufactura, puertos y aeropuertos.
De acuerdo con Ericsson, todos estos casos de uso se traducen en una mejora significativa de la seguridad de los empleados, un aumento de la productividad y la reducción de los gastos operativos.
Con relación al reciente anuncio del despliegue de tecnología 5G en México, Betin recordó que ya hay asignado espectro, en este caso para AT&T y para Telcel, sin embargo, se espera que el próximo año, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) realice un proceso de licitación para colocar bandas aptas para esta tecnología.
“Ahí faltará ver si estos actores que ya disponen de espectro van a querer ampliar un poco más sus recursos o veremos otros actores que entran al mercado”.
A nivel regional, 5G ya se ha lanzado en países como Colombia, Brasil, Perú, Puerto Rico y República Dominicana, además de que varios procesos de asignación de espectro están programados para el primer semestre de 2022.
A decir del directivo, se vislumbra 5G como una oportunidad para que los países de la región continúen con este desarrollo y logren nuevos objetivos como el cierre de la brecha digital, en la que el acceso inalámbrico fijo pueda ser un mecanismo, que significa conectar a aquellas poblaciones sin acceso a internet.
“Por otro lado, se trata de atender a un nuevo segmento que no necesariamente se había visto muy integrado a todo este tema de tecnología de redes móviles celulares que es el segmento o sector industrial a través de la industria 4.0 o cuarta revolución industrial, que se busca complementar con las bondades de 5G para potenciar la productividad, la eficiencia y el crecimiento económico”, expuso.
Recientemente la firma presentó la nueva edición del Ericsson Mobility Report, que muestra que el mercado latinoamericano 5G generará más de 28 mil 400 millones de dólares anuales para 2030 en ingresos por servicios de banda ancha móvil mejorada.
En tanto que el mercado FWA (Acceso Inalámbrico Fijo, por sus siglas en inglés) 5G tiene un potencial de conectar zonas rurales y ampliar la cobertura de banda ancha; se espera que en 2030 tendrá un valor de casi 4 mil millones de dólares, con 21 millones de suscriptores.
«Mantener este impulso y acelerar los despliegues comerciales y la adopción (de esta tecnología) puede ayudar a mejorar a que la región se recupere de la pandemia de COVID-19”, refiere el reporte de la tecnológica sueca.
C$T-GM