Exclusión digital no debe ser una opción para México.
Tras años de ubicarse como el país más caro de América Latina en materia de espectro radioeléctrico, México tiene a través del Congreso de la Unión la posibilidad de reducir los derechos por el uso de todas las bandas de frecuencia al promedio regional, con lo cual no solamente apostará por la reactivación del sector digital sino que evitará que el país pase a la historia como el primero en el mundo en haber creado una política de exclusión digital universal.
“Está demostrado que si hubiéramos bajado el precio del espectro un 30 por ciento en los últimos tres años, hubiéramos conectado a 15 millones de mexicanos, y los que están conectados tendrían 66 por ciento más de velocidad debido a la capacidad de inversión del sector”, sostuvo Jorge Fernando Negrete, presidente de Digital Policy @ Law Group DPL.
En opinión del especialista, si bien es sabido que el Senado de la República podría atender la instrucción de aprobar el presupuesto para 2021 en los términos en los que está, hay legisladores que cada vez más cobran conciencia sobre el impacto para el presente y el futuro digital de México.
“Es difícil poder anticipar, pero hablaría bien de los senadores reducir los derechos, lograrían recaudación relevante y estimularán el ingreso de pago de derechos a las arcas del gobierno mexicano, y le ayudaría más al gobierno saber que va a recaudar una cantidad específica, a que no va a recaudar nada y va a marginar a muchas personas”.
Un estudio de la GSMA realizado en 2019 reveló que en los países en desarrollo, los altos costos del espectro desaceleraron el despliegue de las redes 3G y 4G; para el caso de México, si el precio del espectro hubiese estado en el promedio de América Latina, hoy podría haber 5.5 millones más de mexicanos conectados a redes de 4G y 10 millones a redes 3G, y se podría haber incrementado la velocidad de descarga en 66 por ciento (7 Mbps en promedio).
“La Constitución en el artículo 28 dice claramente dice que las licitaciones no deberán tener como elemento fundamental la recaudación o un interés económico, esto es fundamental, pero se les olvidó a los Diputados en esta primera etapa”.
Jorge Fernando Negrete refirió además que de acuerdo con datos de la Federal Communication Commission (FCC), esa entidad ha licitado más espectro para 5G de todo el que ha asignado a lo largo de su historia; dato que refleja el nivel de desafío que se tiene enfrente.
“El incremento al precio del espectro es una forma de castigar o limitar el ejercicio de la libertad de expresión, el derecho de acceso a la información, es una censura indirecta al derecho a la información y va a limitar el ejercicio del derecho a la salud, la educación, a la seguridad y la movilidad”.
Para el analista, la pandemia permitió demostrar de forma empírica que quien está conectado, preserva el ejercicio de sus derechos fundamentales y eso es algo que el Senado debe poner en la balanza al momento de aprobar más incrementos relacionados con los derechos que los operadores de servicios móviles pagan por usar el espectro en México.
Al conjugar diversos elementos que juegan en contra del futuro del país, el principio base debiera ser evitar incrementar la desigualdad y la marginación social, tanto en el ámbito físico como en el digital, una esfera cada vez más necesaria para el desarrollo económico y educativo de las personas.
C$T-GM