La hacienda pública captó los 52 mdd de la póliza del Centenario siniestrado
El proyecto de construir un satélite de respaldo para la operación del Morelos III sigue en pie, sin embargo, la astringencia presupuestal que se vive obliga al gobierno federal a buscar esquemas de financiamiento que gocen de una mayor flexibilidad.
“Hay muchos avances en el diseño técnico del satélite, es algo que se trabaja con diferentes entidades de seguridad nacional desde hace algún tiempo, hay acuerdos muy positivos, aseguró la Subsecretaria de Comunicaciones, Mónica Aspe Bernal, en el contexto del Congreso Latinoamericano Satelital de Comunicaciones y Radiodifusión.
Entrevistada al término de su participación, destacó el trabajo paralelo que se hace para encontrar un financiamiento que no exija pago de contado desde el inicio del proyecto, lo que permita a México avanzar con satélites y tecnología de vanguardia, bajo una nueva realidad presupuestal.
Aclaró que el pago del seguro por más 52 millones de dólares del satélite Centenario siniestrado en mayo de 2015, fueron recursos canalizados a la hacienda pública, y no son direccionados “en forma automática a la construcción de un nuevo proyecto”.
Cuestionada sobre el inicio de la nueva construcción, declinó ofrecer una fecha, pues aclaró que la industria satelital es un sector de “ciclos muy prolongados; tan solo fabricar un satélite puede llevar hasta 36 meses; pero si está en la mesa de diseño técnico”.
Aseguró que la astringencia presupuestal de los últimos dos años no ha tenido repercusiones en el desarrollo de la política satelital nacional, sin embargo, obliga al gobierno federal a buscar fuentes de financiamiento más competitivas.
En su intervención en el foro, aseguró que los retos de México en la industria satelital, son muy similares a los de diferentes países en América Latina, donde es necesario que los gobiernos y órganos reguladores trabajen en el diseño de políticas de largo plazo que definan las tareas que se tiene en materia de conectividad satelital.
“Los países latinoamericanos, deben aumentar su presencia en el desarrollo de la industria satelital global, no solo participar en el uso de esta tecnología, sino intervenir en alguna cadena de valor o suministro de componentes”.
En México es necesario que los ingenieros y las empresas se inserten en algunos procesos de producción en este sector para que el “conocimiento se quede en el país” y de ser posible se abran oportunidades de exportación.
Finalmente indicó que las inversiones públicas en conectividad e infraestructura satelital, deben aplicarse de manera estratégica, “que no signifiquen solo un gasto sino que generen un verdadero retorno de inversión en la industria”.
Ante representantes del sector satelital de América Latina, habló sobre la conveniencia de establecer proyectos colaborativos, de intercambio de experiencias, conocimiento e infraestructura.
Consideró relevante impulsar en la región satélites de alto rendimiento que eleven la eficiencia de transmisión de datos, así como desarrollar equipos de bajo costo y de fácil instalación para optimizar las tareas de seguridad nacional y de inclusión digital.
C$C-EVP