En México será una realidad hasta 2024.
Aunque en México 56 por ciento de las personas entrevistadas por Deloitte reconocen que no saben lo suficiente sobre redes 5G, la popularidad y el entusiasmo por esta nueva generación móvil registró una caída importante, resultado en buena medida de las noticias falsas y “leyendas urbanas” relacionadas con temas sensibles como la salud, el espionaje y la privacidad.
De acuerdo con el Digital Consumer Trends, panorama en México de Deloitte, la voluntad de cambiar al uso de tecnologías de quinta generación (5G) “si se empiezan a escuchar cosas buenas” pasó del 29 por ciento registrado en 2019 a sólo 16 por ciento en 2020; es decir, una caída de 13 puntos porcentuales.
“Evidentemente el entusiasmo se está contrayendo, hay muchas historias urbanas, no reales, que tienen elementos que le pueden agregar ruido a la popularidad de la 5G, pero es un hecho que en primer lugar, las personas no han escuchado cosas tan positivas sobre esta tecnología”, indicó Germán Ortiz, Líder Nacional de TMT en Deloitte México.
En general, la encuesta mostró importantes rasgos de desinformación, pues además de las personas que afirman no saber lo suficiente sobre esta nueva generación móvil, las quejas y escándalos en las redes sociales que generan noticias falsas lleva a que 22 por ciento crea que existen riesgos para la salud asociados a este tipo de redes.
En este escenario, Deloitte proyecta que en México la tecnología 5G no será una realidad que agregue valor a la economía antes del año 2024; proyección que la firma consultora ha compartido con los operadores de telecomunicaciones que participan en el mercado nacional y para quienes representará uno de los grandes desafíos de esta industria.
“Por un lado, sí hay una infraestructura muy importante y costosa que se debe empezar a implantar, y también los operadores están muy conscientes de que la simpatía que hay a la nueva tecnología ya no es definitivamente la misma y tienen el temor de que esta situación pueda hacer que sus inversiones no sean tan positivas”.
A nivel regional, refirió, Brasil y Colombia son países que han realizado esfuerzos relevantes en términos de adopción de redes 5G; sin embargo, es evidente que el primer reto que enfrentan los operadores es el alto nivel de inversión que se requiere, por lo que en un momento de incertidumbre y crisis económica, la atención se centra en atender la demanda de servicios.
“En Latinoamérica va a haber muy poca diferencia entre el avance que tengan Brasil y Colombia versus México. Evidentemente los operadores quieren que suceda antes, sin embargo, siendo totalmente realistas la adopción de la curva de aprendizaje y la infraestructura, nos da para tres años más y no creo que para Brasil y Colombia sea diferencia”.
El Digital Consumer Trends destaca que las redes de quinta generación serán más confiables en transacciones, alta capacidad de almacenamiento, baja latencia y alta conectividad de terminales, lo cual requiere más espectro a precios competitivos internacionalmente, así como contar con incentivos fiscales para fomentar la inversión de la infraestructura y dar acceso.
“Muchas empresas de tecnología contemplan la red 5G en un futuro para nuevos dispositivos conectados a internet, como vehículos autónomos y equipos médicos inteligentes. Pero antes de dar ese gran salto, están los Smartphones 5G. Varios de ellos todavía necesitan actualizar sus sistemas y desplegarlos en diferentes gamas para ser competitivos y generar la demanda esperada”.
C$T-GM