Frente a una realidad donde 16.9 por ciento de las personas en México todavía no usan internet y donde 20 por ciento de la población rural carece de conectividad, la tecnología satelital pasa de ser una mera solución tecnológica a convertirse en una herramienta de inclusión y equidad.
Debido a los desafíos que México enfrenta tanto en aspectos económicos por las enormes inversiones que se requieren para el despliegue de infraestructura, así como para desplegar fibra óptica a través de montañas, selvas o desiertos para llevar a poblaciones muy dispersas, es necesario buscar otras tecnologías que reduzcan la brecha de conectividad.
Al respecto, Marcos Duarte, gerente general de Hughes México, empresa especializada en conectividad satelital, señaló que ésta es una herramienta fundamental para llevar conectividad a zonas apartadas, de difícil acceso y poca densidad de población, donde viven muchos mexicanos que requieren servicios de seguridad, educación y salud, por mencionar algunos de los más relevantes.
“Al llevar conectividad donde antes no la había, el internet satelital impulsa el desarrollo económico, mejora la calidad de vida y asegura que millones de personas puedan participar plenamente en la sociedad digital”, destacó.
Mientras la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) señala que en el mundo todavía hay alrededor de 2 mil 600 millones de personas desconectadas, en México las cifras parecen más positivas, pero en realidad existen brechas que se deben atender, si se quiere lograr un país más justo y conectado en el futuro.
Por ejemplo, la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH) del INEGI, deja claro que la conectividad es muy distinta en las zonas urbanas que en las rurales, debido a las condiciones antes descritas.
Según este documento, 68 por ciento de las personas usuarias en el sector rural, utilizan internet para acceder a contenidos audiovisuales que incluyen educación, cultura digital y entretenimiento.
Pero apenas 27.2 por ciento accede a contenidos informativos de periódicos, revistas o libros, y solo 23 por ciento utiliza el internet para interactuar con el gobierno, ya sea para realizar trámites, consultar programas sociales o acceder a servicios públicos.
Esto implica una baja interacción con las autoridades que puede explicarse, entre otras razones, por la escasa conectividad que se vive en algunas partes del país, donde es complejo y extremadamente caro desplegar infraestructura física de cables y donde el internet satelital puede hacer una diferencia notable.
Respecto a las zonas rurales del país, la ENDUTIH indica que sólo una de cada cinco personas (19.1 por ciento) utiliza el internet para comprar productos o servicios, en tanto 15.5 por ciento lo usan para hacer pagos en línea y apenas 13.5 por ciento realiza a cabo operaciones bancarias desde sus dispositivos.
Estas cifras pueden mejorar con mayor accesibilidad al internet, que se puede lograr con soluciones satelitales, las cuales zanjan las dificultades del despliegue de infraestructura física en el terreno.
Para llevar internet satelital a zonas apartadas, sólo hace falta instalar una antena en el hogar o negocio para enlazarse con el satélite que, a su vez, se enlaza con la estación terrestre para completar el ciclo, con lo cual se puede cerrar la brecha digital.
C$T-GM