Las funciones que hasta ahora realiza el IFT, y que seguirá ejerciendo hasta la aprobación de las leyes secundarias derivadas de la reforma constitucional en materia de simplificación administrativa, se dividirán en tres instituciones: la Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones (ATDT); el organismo que se cree para temas de competencia; y la Secretaría de Infraestructura Comunicaciones y Transportes (SICT), adelantó la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.
Durante la conferencia de prensa matutina del pasado 13 de diciembre, la jefa del Ejecutivo dijo que todo lo relacionado con el control de las concesiones de radios comunitarias, indígenas y afromexicanas, así como el otorgamiento de otras nuevas que se puedan dar en el futuro, será responsabilidad de la SICT, una vez que se extinga el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT).
A pregunta expresa sobre el futuro de las concesiones de radio comunitaria, Sheinbaum Pardo detalló cómo quedarán distribuidas las obligaciones que realiza el órgano regulador:
“Una parte –la parte más técnica—pasará a la Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones (ATDT); la otra parte (relativa a la competencia) pasará al organismo que se cree para la regulación de las concesiones privadas y la otra quedará en la Secretaría de Infraestructura Comunicaciones y Transportes; ahí estarán principalmente las radios comunitarias y ahí podemos platicar con mucho gusto, para que puedan tener el desarrollo que se requiere”.
Insistió en que la parte técnica de las telecomunicaciones que hoy todavía maneja el IFT, pasará a la nueva Agencia de Transformación digital, organismo al que en el dictamen del Presupuesto de Egresos de la Federación, se le otorgó un presupuesto superior a los 3 mil 100 millones de pesos para el próximo año.
“La otra queda en este Organismo Descentralizado sectorizado en la Secretaría de Economía, que va a regular lo de Cofece y el IFT para evitar monopolios privados. Ese organismo está por crearse. Tiene que venir una ley secundaria para dar sus características, pero mantiene su independencia técnica, pero no la autonomía que se planteaba antes, que en realidad no funcionó para su objetivo que era disminuir la monopolización de ciertos productos y servicios, sino más bien para limitar al Estado, en realidad para eso funcionaban estos organismos autónomos”, aseguró.
La tercera parte de esta división serán funciones que asumirá la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), entre ellas el control de las concesiones para radios comunitarias.
Cabe señalar que recientemente el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) dio a conocer un posicionamiento sobre las consecuencias del recorte del 70 por ciento en los recursos que solicitó para su operación en 2025, el cual pondrá en riesgo el cumplimiento de una serie de obligaciones constitucionales de la institución, entre ellas la operación el programa Pro Radio.
De acuerdo con el IFT, este programa estaba destinado a promover la obtención de concesiones de radiodifusión y telecomunicaciones en pueblos y comunidades indígenas y afromexicanas.
Y es que, a través de este programa, personal del instituto ofrece orientación y apoyo para los trámites y puesta en marcha de estos proyectos que contribuyen a preservar su lengua y costumbres.
C$T-GM