Debe ser autosostenible y de largo plazo: Peralta Higuera.
El cierre de la brecha digital es un objetivo añejo en el país que ha tenido diversos esfuerzos como el Programa de Cobertura Social de Telecomunicaciones que operó durante el sexenio de Felipe Calderón; en el umbral de un nuevo gobierno, algunas voces de la industria se muestran confiadas en que el propuesto Fondo de Cobertura Social de Banda Ancha esta vez sí debe funcionar.
Si bien para algunos especialistas el programa delineado por el equipo de telecomunicaciones del próximo presidente Andrés Manuel López Obrador no es del todo innovador, sí incorpora elementos que podrían hacer la diferencia como operar con inversión pública y privada, además de sumar los recursos generados por multas impuestas por el órgano regulador y de los derechos de uso de espectro.
En opinión de José Luis Peralta, socio fundador de la firma de consultoría Entuizer y representante del consorcio Plan A que busca adjudicarse el proyecto de Red Troncal, alcanzar conectividad universal en México representa atender un rezago importante en materia de inclusión digital, impulsar el crecimiento económico y ofrecer nuevas oportunidades en materia social.
«Hay que recordar que ese fondo se ha tratado de hacer de muchas maneras, pero nunca se ha logrado realizar de largo plazo. Sería deseable que este fondo propuesto funcione así, que dé certidumbre, que no tenga mecanismos complejos como entrar a licitaciones para obtener recursos del fondo».
Del 1 de diciembre de 2006 al 15 de octubre de 2012 se ejecutó a nivel nacional el denominado Programa de Cobertura Social de Telecomunicaciones, que operó con recursos del Fondo de Cobertura Social (Foncos), con el objetivo de incrementar la penetración de los servicios de telefonía básica local, de larga distancia y de internet de banda angosta.
En el marco del Programa de Cobertura Social de Telecomunicaciones, en 2005 y 2006 la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) adjudicó a Teléfonos de México (Telmex) mediante licitación pública, dos contratos para proporcionar el servicio telefónico público y domiciliar en al menos el 10 por ciento de las viviendas electrificadas, e internet de banda angosta, en 11 mil 076 localidades menores a 2 mil 500 habitantes, por un plazo de 10 años.
«Si el fondo de cobertura propuesto por el nuevo gobierno se logra hacer bien será el complemento ideal de otros proyectos esenciales como la Red Troncal y la Red Compartida que ya está funcionado, pero este Fondo de Cobertura Universal debe dar acceso a todos de forma no discriminatoria, no quisiéramos que pasara lo que ha sucedido en otras ocasiones, cuando sólo Telmex tuvo las condiciones para ganar por su tamaño, la idea es que haya una oportunidad pareja para todos».
En opinión del especialista, los futuros operadores de la Red Troncal también deberían tener acceso a los recursos del fondo pues el objetivo común es elevar los índices de conectividad en todas las poblaciones y hogares del país.
Hablar de acceso a Internet, añadió Peralta Higuera, es referirse a comunicación predominantemente garantizada por redes de datos, por lo que es fundamental dejar de pensar en la telefonía como un servicio básico pues lo que las personas necesitan en un contexto cada vez más digital es gozar de plena conectividad para informarse, socializar, entretenerse y desarrollarse en el ámbito económico y cultural.
«Es muy importante que este fondo de cobertura esté pensado para funcionar muchos años y que no dependa necesariamente de un presupuesto anual, que sea auto sostenible de alguna forma o con los propios ingresos de la industria y que ésta pueda acceder si llega a prestar servicios a ciertos lugares. No está fácil pero ya se tiene mucha experiencia en lo internacional y del pasado, para hacerlo bien».
C$T-GM