De cara a la revisión y aprobación de la Ley Federal de Derechos (LFD), en la que se establecerán los precios que la industria deberá pagar en 2025 por el uso del espectro radioeléctrico, la GSMA confía que las autoridades observen, por encima de las metas recaudatorias, la importancia de este recurso como una pieza clave para la innovación e inclusión digital.
El tema es de suma relevancia pues es bien sabido que el costo del espectro en México se encuentra entre los más elevados de la región y es más alto que en la mayoría de los países del mundo, en gran parte debido a la evolución de los derechos anuales en los últimos años.
En este país, el costo total del espectro se compone de pagos iniciales (derivados de asignaciones y renovaciones) y costos por adelantado, es decir, los cargos que cada año son ajustados por el Congreso y plasmados en la LFD, un documento que forma parte del Paquete Económico para el Ejercicio Fiscal 2025, que el Ejecutivo deberá presentar al Poder Legislativo antes del 15 de noviembre.
En entrevista con ConsumoTIC, Lucas Gallitto, director para América Latina de GSMA recordó que en junio pasado, -pocos días después de la elección presidencial-, durante los eventos M360 LATAM y el Congreso Latinoamericano de Transformación Digital en la Ciudad de México, hubo consenso en que el costo del espectro es una de las principales preocupaciones que la industria debía transmitir al gobierno electo.
“Nuestra expectativa es que las autoridades reconozcan el valor del espectro como un recurso clave para la innovación e inclusión digital, priorizando estos objetivos por encima de las metas recaudatorias. Más aún considerando que, en los últimos años, el Estado ha recaudado menos debido a la devolución de frecuencias”.
Lucas Gallito dijo que acercar la posición de la industria representada en la GSMA a las autoridades hacendarias es parte de los esfuerzos de “advocacy”, pieza clave en estos casos, en los que los tomadores de decisión no son necesariamente autoridades especializadas en el sector.
“No solo la Secretaría de Hacienda es un actor relevante en la discusión. La digitalización es una fuerza transversal, así que debemos trabajar como industria para asegurar que los gobiernos, o todos los poderes y niveles, comprendan la relación costo-beneficio del precio del espectro”.
Debido a que una mayor y mejor conectividad genera impactos positivos tanto sociales como económicos, es fundamental observar que secretarías como Educación, Salud, Trabajo y Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano también se beneficiarían de una política de espectro enfocada en el desarrollo digital.
“El alto costo del espectro ha provocado devoluciones y subastas con bloques sin asignar, haciendo que el país tenga hoy menos espectro disponible que en el pasado, a pesar del aumento constante en la demanda de datos. Reducir estos precios es clave para generar mejores condiciones de inversión y fortalecer la conectividad”.
Tan es así que en un análisis publicado en 2022, la GSMA encontró que si el costo del espectro en México hubiera estado alineado con el promedio global, 5 millones más de personas tendrían cobertura 4G, y las velocidades de descarga serían hasta 30 por ciento más rápidas, lo cual refleja cómo el precio de este recurso afecta directamente la cantidad y calidad de los servicios.
Desde la perspectiva de Lucas Gallito, el costo del espectro se vuelve un factor de éxito para el futuro de la 5G, pues de acuerdo con datos de GSMA Intelligence, los beneficios económicos de esta generación pueden generar una contribución económica de 13 mil millones de dólares (0.8 por ciento del PIB) para el país para 2030.
“Los aumentos en productividad y eficiencia derivados de la 5G contribuirían al posicionamiento del país como un destino competitivo para absorber la demanda del nearshoring, una de las grandes oportunidades económicas del nuevo gobierno”.
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