Experiencia internacional genera grandes ejemplos.
En los desastres naturales y situaciones de emergencia, el uso de las Tecnologías de la Información y Comunicaciones (TICs) es parte de la agenda mundial en telecomunicaciones pues representan una oportunidad para subsanar la falta de información que puede suceder en estos difíciles escenarios, al tiempo que ayudan a lograr la eficacia y eficiencia de los protocolos de actuación.
En el documento Uso de las Tecnologías de la Información en situaciones de emergencia: Experiencia Internacional, la oficina de Javier Juárez Mojica, comisionado del IFT, analiza las acciones regulatorias, tecnologías y estrategias implementadas por varios países.
«El objetivo es realizar una revisión general de acciones, medidas y mejores prácticas en otros países sobre el uso de TICs en situaciones de emergencia con la finalidad de contar con un panorama general de experiencias exitosas que pudieran adoptarse y desarrollarse en México».
Al analizar casos de países como Chile, China, Estados Unidos, Haití, Filipinas, Japón, Kenia, Maldivas y Nueva Zelanda, entre otros, el documento enfatiza que la preparación en situaciones de emergencia, su mitigación y respuesta por parte del gobierno, la industria y la sociedad civil, así como la y recuperación de los servicios e infraestructura dañada son impensables sin el uso de las TICs.
Un ejemplo claro son las redes móviles, que resultan útiles para proveer una amplia gama de servicios como el envío de mensajes de alerta temprana, facilitar la respuesta ante emergencias, facilitar la coordinación y evaluación logística, promover flujos de información y comunicación vitales en las poblaciones afectadas.
El análisis elaborado por la oficina comisionado del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) refiere que en Chile, además de identificar oficialmente la infraestructura crítica de telecomunicaciones, el gobierno puso en marcha la interoperación de la plataforma de alerta de emergencia con redes móviles.
Se establecieron además, lineamientos clave que los operadores del país tendrían que atender para la implementación y operación del Sistema de Alerta de Emergencia (SAE) que permite avisar oportunamente a la población sobre emergencias, contar con un sistema de alertas masivas que no sea afectado por las congestiones de las redes públicas y Dirigir los mensajes de alertas a zonas geográficas específicas.
En 2010, refiere, China emitió un reglamento que define el papel de los medios de comunicación en caso de desastres naturales y en el que se estableció, por ejemplo, que las organizaciones periodísticas sean reguladas respecto al tipo de información que transmitirán y quienes no respeten las normas, es decir, que den información falsa o que emitan alertas sin autorización, enfrentarán multas de hasta 50 mil yuanes (alrededor de 139 mil 525 pesos).
Además, en ese país se estableció que la disponibilidad de teléfonos satelitales en lugares propensos a desastres es útil para informar de primera mano al centro de dirección y aumenta las posibilidades de supervivencia.
En Japón, el terremoto y el tsunami que siguió en marzo del 2011 tuvieron un gran impacto en la infraestructura de las TICs de ese país, con una considerable cantidad de equipo destruido como cables e interruptores de redes a las Bases Transceiver Stations (BTS, por sus siglas en inglés) de las redes móviles.
Con el objetivo de fortalecer la resiliencia de la infraestructura de comunicación, después de la catástrofe se implementaron diversas acciones entre las que destaca el fortalecimiento de las comunicaciones satelitales, y con la ayuda de la UIT se desplegaron 153 equipos de comunicación satelital para garantizar capacidad de respuesta en emergencias.
Entre las acciones que los organismos globales como la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) han implementado, el documento da cuenta de los despliegues de telecomunicaciones de emergencia que son parte del Marco para la Cooperación en Emergencias (más comúnmente conocido como IFCE).
«El IFCE proporciona servicios de telecomunicaciones para la mitigación de desastres, así como movilización de recursos inmediatamente después de un desastre para asegurar la continuidad de las comunicaciones».
Por ejemplo, inmediatamente después del terremoto en Haití en 2010, la UIT desplegó las telecomunicaciones móviles por satélite para restablecer los enlaces básicos de comunicación. También creó una Estación Base Implementablede Qualcomm(QDBS), un sistema celular completo diseñado para permitir comunicaciones inalámbricas.
«¿En qué medida los esfuerzos de la sociedad se pueden hacer más eficientes con el uso de las TICS para atender emergencias? ¿Cómo pueden las autoridades y ciudadanos hacer un mejor uso de las TICs para salvar vidas? ¿Qué tecnologías se están desarrollando para auxilio en situaciones de desastre? Estos y otros cuestionamientos orientan el presente documento».
C$T-GM