Postergar procesos, tendencia en América Latina.
En América Latina no se puede seguir hablando de 5G si los países están atrasados o no tienen un cronograma claro de identificación y asignación de espectro radioeléctrico en bandas bajas, medias y altas; pues la disponibilidad de este recurso es clave para las inversiones y el éxito de esta tecnología, aseguró José Otero, director de 5G Americas para América Latina y el Caribe.
«No podemos estar hablando de 5G si estamos atrasados o si no tenemos un cronograma claro de cuándo se va a estar entregando ese espectro, olvidemos la recomendación de la UIT que decía que para el 2020 necesitábamos mil 960 MHZ de espectro en zonas de alta densidad poblacional… hay regiones donde no llegamos ni a 400 Mhz en promedio».
En el contexto del seminario web «Tendencias en el espectro para 5G a nivel global», el especialista dijo que es necesario tener una armonización en las bandas de espectro radioeléctrico que se van a entregar para el uso de 5G; además de acelerar los procesos para asignarlas.
«Vamos a pensar qué es lo que vamos a estar necesitando para apoyar la llegada de 5G, se va a precisar a parte de esos 2 GHZ que está recomendando la UIT para 2020, entre 11 a 18 GHZ adicionales para ofrecer servicios en zonas densamente pobladas, es por esta razón que hay que revisar cuáles son las oportunidades que tenemos por debajo de los 3 Ghz hay que continuar viendo las bandas bajas y medias».
Otero refirió que en países como Estados Unidos ya se han dado procesos para asignar la banda de 24 Ghz, al igual que en Canadá donde se ha tenido una intensa actividad de identificación de espectro para 5G; mientras que en América Latina se registra un atraso en la tarea de identificar bandas medias y altas para el 5G, salvo en el caso de Brasil que sí tiene un cronograma claro.
«Debería haber un énfasis en utilizar la banda 28 tanto para satélites como para servicios móviles que es una banda que se está utilizando en Estados Unidos, Corea y Japón, que la va a comenzar a utilizar este año; se espera que en los próximos 12 a 18 meses la cantidad de personas que van a estar representadas en los mercados que utilicen 5G va a superar a los 2 mil millones de habitantes».
En opinión de Otero, América Latina no sólo tiene mucho trabajo por hacer en materia de identificación de bandas para 5G, sino que además enfrenta un rezago importante en la asignación de espectro que estaba contemplado para servicios analógicos.
«Se escuchan promesas de que se quiere que tal país sea líder en 5G pero no se está entregando espectro, la tendencia que estamos viendo es postergar los procesos de asignación de espectro que se tenían hasta ahora, imponer topes que no corresponden a las recomendaciones de la UIT para que en el mercado todos los que están ofreciendo servicios puedan incrementar su cantidad de espectro».
C$T-GM