Los carriers de cables submarinos están en un punto de inflexión, ante un escenario complicado por la crisis de suministros, la exigencia de nuevas capacidades técnicas para sostener la fuertes demandas de servicios y porque algunos tendidos están acercándose al fin de su vida útil.
“El crecimiento en demanda de capacidad mayorista en América Latina ronda el 23 o 25 por ciento anual, pero es inevitable hablar de la crisis de suministros y de su impacto en el sector. Los precios de proveedores para el segmento submarino se han elevado entre 20 y 30 por ciento en los últimos 18 meses”, señaló Danila Curotto, Directora Editorial del Grupo Convergencia.
En la presentación de la décima edición del Mapa de Carriers de América Latina 2022, explicó que dicho incremento engloba el precio en sitios de construcción, costos de materia prima, plantas de manufactura que no están productivas al ciento por ciento, disponibilidad de barcos y su combustible.
“El mapa se encuentra en un punto de inflexión, en lo que refiere la industria mayorista submarina que reconoce una necesidad de renovación, ya sea mediante nuevos tendidos, esquemas de asociación y contratación de pares de fibra o de espectro en cables existentes, o planes liderados por gobiernos, motivados por cuestiones geopolíticas y no tanto por planes de negocios”.
Existen cuestiones como la antigüedad de los tendidos, desplegados a principios de siglo y que están llegando al final de su vida útil, de entre 20 y 25 años; para ampliar la presencia de actores hiper escala; sostener la propia provisión de servicios; así como el abastecimiento de ciertos verticales que comienzan a aumentar su demanda, como el sector de petróleo y gas en la región del Caribe.
En el mapa se hace hincapié en dos tendidos futuros: Deep Blue ONE de Digicel y Orange, y Carnival Submarine y Network 1 de Telconet, que esas motivaciones; el primero se trata de un modelo de asociación mediante la cual el operador francés busca diversidad para la conectividad provista en la Guyana Francesa.
Con 2 mil kilómetros de extensión, el cable Deep Blue ONE es un proyecto para conectar Guyana Francesa, Surinam, Guyana y Trinidad y Tobago, previsto para iniciar operaciones a finales del 2024 o inicios del 2025; aunque será operado por Digicel como dueño del tendido, Orange contará con de fibra ahí.
“Digicel tiene tres objetivos: Soportar su propia operación en una región donde los actores hiper escala tienen menor presencia, no suelen desembarcar con centros de datos o con zonas locales; asignar capacidad submarina adicional para el sector de Oil and Gas y garantizar resiliencia, por la proximidad del fin de la vida útil del Américas II hacia el 2025 que va a generar un gap en la zona”.
En tanto, con el Carnival Submarine y Network 1, que tendrá 4 mil 500 kilómetros de extensión, entre Ecuador, Panamá, Colombia y Estados Unidos, Telconet busca aumentar la redundancia para el mercado ecuatoriano, ya que hay cables llegando al fin de su vida útil, así como habilitar el primer acceso a centros de datos en la costa oeste de Florida, porque el resto tiene en general punto de aterrizaje al este de esa península.
Destacó los nuevos posicionamientos de dos compañías: Cirion luego de que Lumen cerrara la venta de sus operaciones en América Latina a Stonepeak, y por otro lado, GlobeNet, tras la integración con V.tal
Entre los proyectos con incidencia geopolítica y de habilitación de nuevos lazos comerciales, mencionó al Humboldt que unirá a Valparaíso con Sydney que se espera brinde servicios para 2026, y a las dos iniciativas que están en estudio para alcanzar la Antártida, una del Estado chileno y otra de Silica Networks.
“El tendido de 14 mil 810 kilómetros que unirá a Valparaíso con Sydney que requerirá una inversión de 394 millones de dólares… puede tener un impacto para América Latina… Busca capturar 18 por ciento del tráfico entre Sudamérica y Asia Pacífico y el tráfico, podría crecer a una tasa anual de 28 por ciento en los próximos 25 años”.
En redes terrestres se ve una diversificación y fortalecimiento que prevé acompañar el entorno de centros de datos de menor tamaño, más distribuido geográficamente, para acercarse al usuario y con nuevos requerimientos de capacidad.
“Los grandes proveedores de nube están enfocados en crear nubes específicas para ciertos sectores verticales de la economía para retail, educación y también se da una multiplicación de regiones para acercarse a empresas de todo tamaño”.
De manera paralela, dijo, se observa una consolidación del Edge con alrededor del 90 por ciento de líderes de empresas a nivel mundial dispuestos a trasladar aplicaciones de un modelo local a uno perimetral, debido al mayor uso de apps con requerimientos de menor latencia.
C$T-EVP