Se multiplica por seis robo de celulares.
El tema de la inseguridad en el sector de las telecomunicaciones se manifiesta en diversas dimensiones, se trata de un fenómeno creciente en lo relacionado al robo de celulares, uso ilícito de torres, así como llamadas vinculadas a casos de extorsión y secuestro en diferentes penales del país.
«Este tema es de gran preocupación por ser México un país que se ve afectado enormemente por la inseguridad en varias dimensiones, como lo muestran tres recientes estudios elaborados por la Anatel, precisó» Gabriel Székeli, director General de la Asociación Nacional de Telecomunicaciones.
Reconoció que el robo de celulares en el país se desconoce con precisión; sin embargo, la Anatel en conjunto con la GSMA, establecieron un programa para denunciar la pérdida o el robo de su celular, mediante el cual se conoce que en 2012 se cometieron 156 mil delitos de este tipo, cifra que se multiplicó seis veces para 2017.
«Pero eso solo se trata de la gente que se anima a realizar una denuncia, de ninguna manera representa el total de los robos; no hemos logrado parar ese problema, solo tratamos de ayudar a la gente que solicita la inhabilitación del celular a través del IMEI».
Otro ilícito recurrente, denunció, se registra cuando los operadores tratan de dar mantenimiento a las torres, «donde se descubre que se han instalado equipos sofisticados de terceros, sospechamos quien los ha dejado ahí, sobre todo cuando «llegamos y guardias privados o municipales le impiden la entrada del personal de la compañía», afectando con ello la calidad de los servicio que ofrecemos.
Otra dimensión de los problemas de inseguridad que enfrenta el sector, esta focalizado en los penales. Un estudio realizado en siete cárceles de los 400 que operan en México, permitió detectar que los bloqueadores de señal que deben operar en esos centros no funcionan.
Durante tres semanas la Anatel realizó un estudio en 2016 en siete penales donde se detecto mil equipos de comunicación, los cuales según algunas variables analizadas, fueron utilizados para realizar al menos 4 millones de llamadas al año, para realizar delitos como amenazas de extorsión y secuestro, resaltó en un reporte que fue entregado al candidato a la presidencia, Ricardo Anaya.
En el contexto «México Digital. Innovación y Transformación Tecnológica para Crecer con Inclusión y Equidad», dijo que se trata de problemas que por su dimensión no lo tratamos en forma abierta, pero que de cara a las elecciones del primero de julio próximo, es pertinente que los candidatos estén informados de cuál es la problemática que enfrenta el sector de las telecomunicaciones.
Székeli dijo que en la Anatel advierten algunos aspectos fundamentales para que el país despegue hacia una nueva etapa: Regulación donde hay que poner al día el modelo existente de cara al nuevo mundo digital que se avecina, en el que prevalezca una importante colaboración entre autoridades y empresas para enfrentar los cambios tecnológicos y los nuevos modelos de negocio.
Cubrir la necesidad de espectro, disponible en tiempo y accesible en precio, así como facilitar la instalación de nueva infraestructura «tremendo problema que se deriva por la falta de coordinación entre las tres instancias de gobierno».
«Eso ha dado lugar a casos de corrupción en muchos sentidos, sin que se considere las oportunidades de generar un nuevo modelo con el liderazgo del gobierno que sea electo en julio próximo, de tener un nuevo enfoque para resolver, con las aspiraciones legitimas que tiene cualquier municipio, un viejo tema que obstaculiza las inversiones y la conectividad.
También destacó como toda vida pública y privada esta influida por la tecnología, y ejemplo de ello es como en 2006 en México habían solo 12 millones de internautas y actualmente de un total de 89 millones de electores registrados, casi 59 millones de personas están conectadas a internet, lo que explica la relevancia que han tomado en estas elecciones, el manejo de las redes sociales.
Sin embargo, admitió que la brecha digital también se refleja entre los votantes de manera muy importante, pues existe un número de 39 millones de personas que si tendrán derecho a votar en estas elecciones, pero que no tienen acceso a internet, «un reto enorme por superar en México».
C$T-EVP