Información y entretenimiento, principales actividades de internatuas.
A cinco años de la reforma en materia de telecomunicaciones que dio paso a una nueva arquitectura jurídica en México, los avances relacionados con la penetración de servicios, calidad y precio son evidentes; sin embargo, el país aún enfrenta el desafío de garantizar que la conectividad sea un motor eficaz para elevar la productividad, el conocimiento y el desarrollo económico.
«La conectividad es una herramienta invaluable para mejorar la productividad; a través de la conectividad podemos asegurarnos de ser no solo consumidores de contenidos audiovisuales, de información o de entretenimiento, sino también de generar valor, de comprar y de vender, de abonar a la cadena de procesos productivos», dijo Gabriel Contreras, presidente del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT).
En opinión del funcionario, llevar a todos los sectores productivos los beneficios que ofrece la conectividad es un reto que México comparte con el resto de América Latina en donde la pregunta vigente sigue siendo ¿para qué y por qué tener ciudadanos conectados?.
«Los beneficios de la conectividad están a la vista: un agricultor puede incrementar sus ganancias alrededor de 30 por ciento mediante el uso de plataformas y conetividad porque tiene información puntual y en tiempo real de condiciones climáticas, canales de distribución, entre otras cosas, esto se puede llevar a todos los sectores productivos de la economia nacional y es un reto que compartimos en la agenda de América Latina. Sí, tenemos conectividad pero ¿para qué?».
De acuerdo con datos de la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH) 2017, las principales actividades de los usuarios de internet son obtener información, entretenimiento, la comunicación, así como el acceso a contenidos audiovisuales y a redes sociales.
«Tenemos una gran oportunidad que aprovechar, es un reto que tenemos como país, esa no es tarea del regulador, pero vale la pena enunciarlo. Entre los retos que compartimos con el resto del mundo está el de generar condiciones de seguridad en el uso de las redes, en las plataformas que circulan en las redes, la ciberseguridad, la privacidad, y la protección de datos personales».
Para el presidente del órgano regulador, la reforma constitucional realizada en 2013 generó cambios sustanciales en favor de los usuarios de servicios como la telefonía, internet y televisión abierta y restringida; sin embargo, es fundamental garantizar el fortalecimiento y consolidación de esos beneficios.
«La regulación debe buscar en todo momento seguir generando mejores condiciones de competencia, disminuir barreras y siempre tener un enfoque de largo plazo de protección de los usuarios para que podamos elegir quién nos da el servicio, es un derecho».
Si bien la penetración de banda ancha ha crecido a nivel nacional como resultado de más y mejor oferta, precios atractivos y calidad superior, el cierre de la brecha digital es todavía una asignatura pendiente, expuso luego de su participación en el foro ¿Ganamos o perdemos los consumidores con la Reforma de Telecomunicaciones?.
«Hemos avanzado mucho pero no ha sido igual en todo el país, tenemos entidades de la República que tienen niveles de penetración muy bajos y si uno va a las zonas rurales es aún más; es cierto que hay proyectos en marcha que van a lograr llegar hasta allá como la Red Compartida, pero es importante seguir haciendo todo para eliminar barreras para el despligue de infraestructura y que sean los operadores quienes puedan llegar a estos lugares».
Para enfrentar la brecha digital en el país, enfatizó, es necesario analizar las buenas prácticas que se realizan a nivel internacional para que, con creatividad, sea posible encontrar nuevas formas de incrementar la cobertura; un objetivo que el IFT ha tomado en cuenta en procesos de licitación como el de la banda de 2.5 GHz.
«Hay que ser creativos también, en ningún país del mundo ha llegado el mercado solo a todos los lugares, hay que ver las buenas prácticas a nivel internacional, existen fondos públicos o de los operadores que permiten incrementar la cobertura. El IFT ha trabajado incluso en imponer obligaciones de cobertura como en la licitación de la banda 2.5 GHz».
C$T-GM