El mercado de las telecomunicaciones en América Latina crece a un ritmo bajo, hay riesgos de concentración, desafíos en materia de tecnología, regulación y economía, todo ello con un “elefante en la sala”, que se llama aranceles.
Expertos del sector, reunidos en la edición 2025 de Conecta México, coincidieron en este análisis, donde parece llegar la hora de preguntarse qué conviene más: pocas empresas fuertes y capaces de invertir o muchas que no necesariamente cuenten con esa opción.
Ari Lopes, especialista de OMDIA para América Latina, señaló que las empresas del sector crecen, pero a tasas “no espectaculares” mientras las inversiones se reducen.
Al presentar la ponencia: “Los cambios en el mercado de telecomunicaciones en Latinoamérica”, advirtió que “estamos en medio de un ciclo de reducción de inversiones hasta 2026. “En los 18 países donde hacemos monitoreo de Capex en la región, ya hemos visto una reducción de 3 mil 600 millones de dólares y esto va a seguir en 2025 y 2026”.
A su vez, en el panel “Perspectivas del mercado telco para 2025”, Víctor Pavón Villamayor, presidente ejecutivo de Oxford Competition Economics abrió la reflexión con los tres temas principales que habrá que discutir en el año: tecnología, regulación y economía.
En materia regulatoria, México enfrenta un reto importante por la transición en la autoridad regulatoria, con las reglas asimétricas como una gran incógnita, porque aún no están claros los esquemas.
En lo económico, “el nuevo tema, el gran ‘elefante en la sala’ que no podemos dejar de estar pensando, es el tema de la guerra arancelaria, cómo esto podría estar empezando a generar problemas no contemplados hasta hace algunos meses en el sector”.
Y en materia de tecnología, uno de los grandes retos, además de garantizar la cobertura en todos los países de la región, es cómo las empresas del sector pueden aprovechar las nuevas tecnologías, como la IA, no sólo para su propia operación, sino para ofrecer servicios a sus clientes.
En su oportunidad, Carlos Hernández director de Análisis ICT de The CIU, destacó que la economía no verá un crecimiento del mercado, a pesar de que el consumo va en ascenso y no se desacelerará, en tanto el uso de tecnología no se va a detener, si bien la guerra arancelaria seguramente afectará.
En lo regulatorio, México particularmente enfrenta una transformación en el modelo, donde pasa de un órgano que es sustituido por dos y en el que persiste el retraso en el tema del espectro para los servicios 5G, entre otros retos.
Además, anticipó que el sector de las telecomunicaciones, también resultará afectado por la guerra comercial porque “si bien no importamos servicios, sí lo hacemos con fibras y equipos tecnológicos, pero serán procesos con impacto en el mercado”.
A su vez, Jesús Romo, director de investigación para el mercado de Telecomunicaciones, Data e Inteligencia para las Américas de Globaldata, advirtió que a mitad de la década y conviene preguntar “quién va a poner la tecnología necesaria para atender el crecimiento de los servicios”.
Recordó que de acuerdo con la GSMA, las inversiones necesarias en la región para extender los servicios de 5G y fibra, superarán los 32 mil millones de dólares en un plazo muy breve y todo frente al “elefante en la sala” que significan los aranceles.
La pregunta en materia de infraestructura es “cómo complementar lo que falta y compartir lo que existe”, donde tecnologías disruptivas como la IA se convierten al mismo tiempo en habilitador y reto que genera expectativas tanto en los clientes como las empresas.
C$T-EVP