La previsión, decisión y voluntad del gobierno, reguladores y legisladores en la licitación 5G en Brasil es un referente que deberán tomar los países de América Latina si quieren avanzar en acortar la brecha digital y aumentar la productividad, para conducir a la región hacia un mayor crecimiento económico que impactará tanto a nivel local como regional.
“No tenemos que focalizar únicamente en el proceso de asignación de bandas para IMT, sino tenemos que verlo como un conjunto de acciones, de políticas y planificación que dieron como resultado la subasta que permite asfaltar esa carretera invisible para los nuevos servicios que van a ir montados sobre la tecnología de quinta generación”, aseveró Lucas Gallitto, director para América Latina de la GSMA.
En el marco del evento virtual Brasil 5G “Un diálogo con América Latina”, organizado por DPL Group, el especialista reconoció que para obtener el éxito, en esta licitación estuvieron implicadas muchas variables, como la reglamentación y la renovación de licencias.
“Se habló de la renovación de licencia, como la renovación ilimitada, que es un tema que está muy en boga en muchos países en la región, y me parece que es importante empezar a hablar un poquito de la importancia de las renovaciones, de la ampliación, de la duración de las licencias”.
Lucas Gallito subrayó que se necesitan precios razonables de espectro, así como su uso eficiente, que permitan conectar a más ciudadanos, ya que alrededor del 58 por ciento de los latinoamericanos están conectados, pero se podrían tener conectados a prácticamente el 90 por ciento.
“¿Qué pasa con ese otro 40 por ciento que viven en zonas de cobertura, y sin embargo, no son usuarios de banda ancha móvil?… La falta de contenido local relevante, potenciar el contenido local, la falta de aptitudes digitales, claramente son cuestiones relevantes”.
Todo ello, expuso, será importante para la economía de la región, pues 5G será ese activo estratégico que los países van a tener para mejorar su productividad, en especial ante las “trampas” de las que habla la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
El informe Perspectivas Económicas de América Latina 2021 de la OCDE indica que la crisis sanitaria ha demostrado que la estructura de producción de América Latina y el Caribe actúa como un factor limitante para el crecimiento de la productividad.
“… La adopción de políticas coordinadas serán clave para garantizar la creación de oportunidades digitales que puedan transformar la estructura productiva y desarrollar las capacidades de producción locales y regionales”, señala el documento.
Por ello, Gallitto enfatizó que América Latina está frente a la oportunidad de tratar de empezar a reducir esas trampas, con políticas públicas que potencien la tecnología de quinta generación.
“La llegada del 5G a un país no debe ser simplemente ponerse una medalla, sino el espíritu que está detrás de eso, que la quinta generación sea el vehículo principal de la cuarta revolución industrial”.
C$T-GM