Pueden generar insomnio, ansiedad y dependencia.
Si bien la tecnología aporta diversos beneficios a los menores de edad, un uso desmedido de juguetes y dispositivos inteligentes puede representar serios problemas en su desarrollo intelectual, social y emocional, e incluso ponerlos en riesgo de manera física.
«Está comprobado que su uso indiscriminado vuelve a los niños más pasivos, se aíslan y disponen de una actitud menos crítica hacia la vida. Además, cuando no hay supervisión por parte de los padres, los niños y adolescentes pueden ponerse en riesgo debido a que muchos de estos dispositivos están abiertos a Internet y a las redes sociales», señaló Claudia Sotelo Arias directora del Centro de Especialización de Estudios Psicológicos en la Infancia (CEEPI).
La especialista refirió que los regalos relacionados con tecnología (videojuegos, teléfonos y juguetes inteligentes, cámaras fotográficas y drones) toman cada vez más relevancia para los niños de 11 años en adelante.
«Casi cinco de cada 10 pedirá como regalo alguno de estos juguetes o dispositivos inteligentes en vez de uno donde puedan tener actividad física (bicicletas, patines, patinetas, balones de futbol, etcétera) o de destreza (legos, rompecabezas) y en mucho menor medida libros y ropa».
De acuerdo con datos del CEEPI, este comportamiento se acentúa con la edad: menores de 10 años prefieren juguetes tradicionales, mientras que los mayores de 11, quieren de regalo algún gadget.
Por ello, Sotelo Arias sugirió no regalar este tipo de juguetes en la niñez temprana, pues los dispositivos tecnológicos pueden generar insomnio, ansiedad y sobre estimulación, una actitud hostil pero sobre todo dependencia, «llega un momento en que literalmente no pueden dejar de usarlos. Por ello la recomendación es siempre supervisar su uso».
En este sentido, el CEEPI recomienda fomentar en los menores los juegos donde esté de por medio la actividad física, la destreza mental (juegos de mesa o de destreza, rompecabezas, legos) y que genere socialización con otros niños.
«La idea es que estén activos. Que su energía se cristalice en el juego, armando rompecabezas, practicando deportes, dibujando, cantando, jugando con otros niños y con sus papás y porqué, no combinar con responsabilidad el uso de los juguetes y dispositivos inteligentes».
C$T-GM