Delitos cibernéticos sin tipificar, alimentará su permanencia.
Para contar con mejores prácticas en la operación de canales digitales y el uso de redes sociales, particularmente en materia de temas políticos, es imprescindible que las empresas digitales favorezcan la libertad de expresión, transparenten bloqueos, así como la suspensión de cuentas, recomiendan algunos académicos de universidades.
A raíz de los disturbios en el Capitolio de Estados Unidos y la correspondiente suspensión de la cuenta de Twitter del expresidente Donald Trump, quedó demostrada la gran responsabilidad que tienen las plataformas tecnológicas al arbitrar la esfera pública, destacaron en el marco de la la Cátedra Theodor Heuss 2021 sobre Redes Sociales y Política.
Por ello, para sumarse al quehacer democrático digital, empresas como Facebook, Twitter, Google y Apple tienen varias tareas, porque “la evolución de las redes sociales presenta uno de los desafíos de política más importantes del siglo, debates a su alrededor no pueden basarse en regulaciones”, afirmaron los expertos.
Soluciones centradas en erradicar “bots”, “trolls” y algoritmos, están condenadas al fracaso, porque los costos de ser capturado como “troll” son bajos y no hay tipificación de delitos cibernéticos. No hay costos más altos que una cuenta suspendida, lo que en su opinión seguirá incidiendo en la difusión de noticias falsas y discursos de odio.
Por ello la propuesta hacia los gigantes tecnológicos es revisar la manera en que difunden información; es necesario lograr que la publicidad política en redes sea transparente; seguir una ética periodística en el manejo de noticias; asumir la responsabilidad editorial del contenido permitido y promover canales más abiertos para la investigación y transparencia en los recursos.
“Las empresas de tecnología, junto con los usuarios y diversas organizaciones deben comprender que la alfabetización mediática va más allá de ser escépticos a todas las fuentes de información. Al apoyar los valores liberales, las redes sociales pueden ayudar a promover la democracia y las sociedades abiertas cambiando la narrativa”.
En el encuentro del ITAM y la Fundación Friedrich Naumann para la Libertad, las recomendaciones de los especialistas para que las empresas tecnológicas trabajen en ofrecer un mejor marco para los derechos digitales son: promover siempre la libertad de expresión y un debate abierto, para lo cual sugirieron contar con expertos que analicen manipulaciones, procesos de decisión de eliminación unilateral de contenido o suspensión de cuentas.
De igual importancia sería fortalecer la transparencia y la libertad. En este punto subrayaron la importancia de proporcionar información responsablemente sobre la eliminación de contenido y suspensión de cuentas, porque “la decisión de bloqueo tiene un sesgo y no permiten que estos espacios permanezcan libres”.
La educación en derechos humanos es otra de las tareas a realizar, porque a mayor educación se podrá genera mayor pluralismo en el mundo digital. Es conveniente trabajar en forma conjunta con organizaciones y periodistas para formarse en derechos humanos y en los mecanismos necesarios para protegerlos y promoverlos. Deben identificar el discurso de odio, la desinformación y aplicar una conducta ética.
También recomendaron promover el papel fundamental de los periodistas para las democracias y su protección: las redes sociales deben monitorear el activismo digital personalizado y cuidar que no surjan o se distribuyan nuevas ideologías o teorías de conspiración.
C$T-EVP