Inmersos ya en la Cuarta Revolución Industrial, que supone acelerados cambios tecnológicos, 2023 será un año en el que veremos el surgimiento de nuevas herramientas digitales, pero también maneras innovadoras de utilizar las ya conocidas por lo que Centro México Digital (CMD) recopiló las principales tendencias de transformación digital que marcarán los próximos meses.
“Hay conceptos ya establecidos como las redes 5G, la Inteligencia Artificial (IA) o la Realidad Aumentada (RA), sin embargo, eso no significa que ya sepamos todo sobre estos temas. Al contrario, los nuevos desarrollos tecnológicos se basarán en ellos”, señala Salma Jalife, presidenta del CMD.
Es así que una de las tendencias de la transformación digital que se sumarían a la vida diaria de los usuarios del internet, ya sean personas u organizaciones, a través de diversos productos o servicios es la Plataformas “todo en uno” o Súper Apps.
A través de estas herramientas que iniciaron en China, pero se están extendiendo hacia Latinoamérica y Europa, se puede chatear y realizar diversas acciones, como pedir comida a domicilio, hacer una transferencia, pagar algún servicio o reservar algún transporte.
“Solo con una aplicación podrías hacer todas las actividades anteriores, lo que mejora radicalmente la experiencia de usuario y el aprender a utilizar solo una aplicación en lugar de varias. Las más conocidas son WeChat, Rappi y Alipay”.
Por su parte, la Realidad Extendida (XR) es una una tecnología inmersiva, cuyos usos se pueden ver principalmente en los videojuegos, pero tiene múltiples aplicaciones que están ya en desarrollo.
Incluso, el CMD señala que ya está formando parte de procesos industriales, de ventas, marketing, educación y entrenamiento porque facilita un espacio seguro y muy apegado a la realidad para crear y hacer pruebas.
La preocupación por el cuidado del medio ambiente está impulsando la creación de herramientas sustentables; así que las industrias de todos los sectores están buscando cómo optimizar sus procesos para reducir su huella de carbono y que la tecnología digital les permita cumplir con regulaciones ambientales y sociales.
De ahí que la Tecnología para la Sustentabilidad sea otra tendencia que tomará fuerza este año, y algunos ejemplos son las aplicaciones móviles para el monitoreo y seguimiento del consumo de energía, sistemas de transporte compartido para reducir el número de viajes o herramientas digitales para la planificación y gestión sostenible de los recursos naturales.
La Confianza Digital será otro de los temas que acaparará los reflectores, pues se trata de un aspecto fundamental para que los usuarios se sientan cómodos y seguros en el entorno digital.
“La confianza digital es indispensable para la innovación y la adopción tecnológica, por lo que es necesario trabajar en herramientas, procesos y regulaciones para crear un ambiente digital seguro. Por lo tanto, la importancia de crear confianza en el mundo digital seguirá aumentando en 2023 y se requerirán más especialistas en ciberseguridad y hacking ético”.
Asimismo, la Automatización Robótica de Procesos (RPA, por sus siglas en inglés) se coloca también como otra tendencia, porque se espera que más empresas inviertan en el uso de robots para realizar tareas repetitivas, como procesar transacciones, responder correos electrónicos o gestionar datos.
Las otras dos son la Computación Cuántica y la Computación Periférica (Edge computing). La primera ya no se limitará sólo a los centros de investigación o universidades, puesto que su capacidad de análisis y para actuar sobre los datos es muy útil para sectores como el médico o el financiero.
El Centro México Digital prevé que durante el año, gracias a la computación cuántica, se podrá ver el progreso en temas de ciberseguridad, aprendizaje automático cuántico y automatización.
En tanto, la Computación Periférica será indispensable ante el incremento del Internet de las Cosas (IoT), y será muy útil y conveniente para procesar datos sensibles que no es necesario que circulen por todo Internet.
El uso de la Computación Periférica reduce la latencia, ayuda a recopilar y analizar datos de forma más eficiente porque su infraestructura está más cerca de la fuente de origen.
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