Crecen casos de pedofilia y pornografía infantil.
En México, 33 por ciento de las niñas, niños y adolescentes no recibe orientación en la escuela sobre los peligros que pueden enfrentar en la red, en tanto que 15 por ciento de las madres y padres de familia manifiestan que sus hijos han tenido acceso a material inapropiado; todo ello en un contexto donde delitos como el abuso sexual infantil sumaron 5.4 millones al año 2020 y el 27 por ciento de los casos de trata de personas tiene como víctimas a menores de edad.
La ciberseguridad no se resuelve solo con tecnología, hay que integrar diversas aristas como identificar la regulación idónea, establecer indicadores, ejercer estrategias en distintos ámbitos, así como generar un perfil muy puntual del usuario en general, particularmente de los niños, niñas y adolescentes que actualmente representan el grupo más vulnerable al navegar en internet.
De acuerdo cifras de la Guardia Nacional, los delitos cibernéticos cometidos contra menores de edad aumentaron 157 por ciento y el delito de pornografía infantil aumentó 73 por ciento; pese a esta tendencia, sólo 4.0 por ciento de las madres y padres encuestados dijeron que las experiencias negativas que sufrieron sus hijos fueron reportadas a las autoridades.
En la presentación del estudio sobre Ciberseguridad en Empresas, Usuarios de Internet y Padres de Familia en México 2021, se destacó que uno de los grupos más vulnerables y que genera mayor preocupación son los menores de edad, pues algunos indicadores muestran que no se está ofreciendo la orientación adecuada, ni se están ejerciendo los controles idóneos para evitar que sean presa de la ciberdelincuencia.
El estudio de la Asociación de Internet .MX (AIMX) mostró que 47 por ciento de las madres y padres no usa un sistema de control parental, de esa cifra, 14.9 por ciento admitió que es por desconocimiento de la herramienta, pero aún más crítico es que el 23 por ciento no ejerce control alguno sobre el tiempo que los menores pueden estar conectados y utilizando sus dispositivos.
“Esto es riesgoso porque las niñas, niños y adolescentes entran a una realidad sin control y en la red pueden encontrar a una persona buscando hacer amistad que dice ser también un niño, pero dentro de internet se conoce que no siempre es así”, dijo Pablo Corona, adjunto de la Vicepresidencia de Ciberseguridad de la AIMX.
Casi el 50 por ciento de los padres encuestados en el estudio destacó que una de sus principales preocupaciones es que sus hijos puedan sufrir algún incidente de acoso cuando navegue por la web, una problemática constante, así como el aislamiento importante que tienen los menores al estar un tiempo apreciable conectado a internet.

El estudio también detectó que uno de los principales problemas que tienen los padres con sus hijos es establecer límites en el uso de dispositivos y tiempo de estar conectado a internet. Un 88 por ciento dijo estar al tanto de las actividades que realizan sus hijos en la red, aunque entre mayor es la edad de los niños, niñas y adolescentes, menor es la incidencia de sus tutores.
Los padres mostraron preocupación porque en la escuela los menores de edad no reciben orientación sobre los peligros que pueden tener al navegar en internet, un tema delicado si se considera que al menos 23 por ciento de los menores han sufrido algún tipo de ciberacoso en la red, de acuerdo con el INEGI, además de otras experiencias negativas.
En 2020 los casos de pedofilia y pornografía infantil se dispararon respecto a los niveles reportados en 2018-2019, y para enero-mayo de 2021, el crecimiento de 20 por ciento de casos difamación en menores, acoso contra menores de edad en 45 por ciento y amenazas contra menores de edad en cerca de 15 por ciento.

Por todo lo anterior se puede afirmar que la ciberseguridad no se trata solo de un problema de bits y bytes, o de computadoras, sino que trasciende la vida cotidiana de los usuarios, pues todo lo que sucede en el mundo digital, tiene consecuencias o se ve reflejado en el ámbito físico.
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